Qué hacer al sufrir calambres musculares mientras corres
Los corredores que han alguna vez han sufrido calambres en plena carrera saben lo mal que se pasa. Son molestos, dolorosos y casi siempre aparecen en el momento menos pensado. Se trata de una contracción involuntaria que aunque tiene una duración corta se acaba prolongando en el tiempo. Básicamente el origen de estos problemas musculares se encuentra sobre todo en la fatiga muscular, aunque hay runners que lo achacan al déficit de electrolitos. Hoy te explicamos qué hacer al sufrir calambres musculares mientras corres.
Estas contracciones suelen aparecer sobre todo en isquiotibiales y gemelos. En este artículo te daremos unos cuantos consejos para que actúes con rapidez cuando se produzca una molestia de este tipo y no te retires de la carrera.
Determinar el motivo
Si conseguimos saber cuál es el motivo de los calambres posiblemente esta información nos resulte de gran ayuda para actuar en consecuencia. Puede ser por la pérdida de electrolitos o la fatiga muscular. En el primer caso es preciso que se repongan con la ingesta de líquidos durante la carrera. Los electrolitos son sustancias que están en la sangre y que llevan una carga eléctrica y que influyen en la acidez de la sangre y en la actividad muscular.
Los calambres también aparecen por culpa de la sobrecarga muscular, en donde nuestro cuerpo empieza a notar el sobreesfuerzo.
Detener la marcha
Cuando somos víctimas de un calambre lo mejor que podemos hacer para disminuir el dolor es dejar de correr durante unos minutos e intentar estirar la parte afectada. Los calambres suelen prolongarse durante un par de minutos, así que si detenemos la marcha al instante de notarlos conseguiremos reponernos mucho antes.
Los corredores con más experiencia suelen alterar su técnica de carrera para que el músculo dañado no trabaje tanto. Por lo general, al acortar la zancada conseguiremos que el dolor vaya aminorando.
Estirar bien
Si te ves obligado a detener la marcha por culpa de los calambres, lo aconsejable es que estires lo mejor que puedas. Hazlo con suavidad y piensa que no tratas de mejorar la flexibilidad, sino que el músculo deje de contraerse y se relaje.
Medias de compresión
Existe la posibilidad de prevenir la aparición de estas contracciones musculares si utilizamos medias de compresión, sobre todo en la zona de los gemelos. Está claro que no son muchos los que corren con este tipo de prenda y que en plena carrera no vamos a detenernos para cambiarnos los calcetines. En ese caso, tienes la opción de apretar con tus manos la zona afectada.
Hidratarse adecuadamente
Otro método que resultará de gran utilidad para rebajar las molestias que se producen por culpa de los calambres pasa por comer algo o beber. Será una manera de engañar a tu cuerpo, ya que el cerebro se ocupará de mandar señales de relajación al músculo, sobre todo cuando las contracciones sean por la carencia de electrolitos. Más que beber agua lo mejor es decantarse por bebidas isotónicas. Aprovecha para ingerir líquido en todos los avituallamientos que haya en la prueba.
Lo último en OkSalud
-
Alba Santaliestra: «Los snacks escolares se deben adaptar al nivel de actividad de los niños»
-
La alergia a la proteína de la leche de vaca: un experto explica cómo identificarla y manejarla
-
Rafael Gómez y Blasco: «Hay compuestos en cosméticos y textiles capaces de alterar nuestro sistema endocrino»
-
Ni fresas ni tomates: el alimento que contiene mayor número de plaguicidas en España, según un reciente informe
-
El Hospital Intermutual de Levante adjudica a A.M.A., la Mutua de los profesionales sanitarios, su seguro de responsabilidad civil
Últimas noticias
-
Ángel Víctor Torres manipula las declaraciones de Tellado para acusar al PP de «llamar a la violencia»
-
La costumbre en los bares de León que los turistas madrileños no entienden: siempre hay que explicárselo
-
Grecia lanza una gran rebaja de impuestos mientras Sánchez se enroca en la voracidad fiscal
-
Jim Jarmusch gana el León de Oro en el Festival de Venecia por ‘Father Mother Sister Brother’
-
Adiós a la Lotería de Navidad: las matemáticas revelan el sorteo que es mucho más fácil de ganar