Cuánto tiempo debemos esperar a ducharnos después de hacer ejercicio
Uno de los mejores momentos del día para los deportistas es cuando se meten en la ducha. Es la oportunidad que tienen para relajarse y recuperar la normalidad en unos músculos muy castigados por la actividad. En este artículo te desvelamos cuánto tiempo debemos esperar a ducharnos después de hacer ejercicio.
El sudor regula la temperatura
Cuando se realiza cualquier tipo de deporte o actividad la temperatura de nuestro cuerpo sufre una subida y el organismo debe hacer todo lo posible por controlarla. De eso en realidad se ocupará el sudor.
Los minutos que deben transcurrir entre que se acaba el ejercicio físico y nos metemos en la ducha dependen de una serie de factores, como pueden ser la intensidad de la actividad, la temperatura del ambiente y los condicionantes genéticos de cada uno que determinan los niveles de sudoración.
Los distintos factores
- Cuanto más alta sea la temperatura externa la transpiración también será mayor. El cuerpo es el encargado de controlar la temperatura expulsando sudor a través de la piel. Puede que en temperaturas más bajas no lo aprecies con tanta claridad, pero aunque estemos más secos después del ejercicio el organismo sigue controlando los grados de nuestro cuerpo.
- La intensidad: La transpiración también será mayor a medida que se incremente la intensidad de la actividad. Como ya sabrás no se suda igual corriendo diez minutos a gran ritmo en cinta que caminando. En cualquier caso la temperatura sufre incrementos que el propio cuerpo se ocupa de gestionarla.
- Condicionantes genéticos: Hay gente que suda mucho incluso sin necesidad de hacer deporte a gran intensidad o durante mucho tiempo. Eso depende en cierta medida de las condiciones de cada uno. Hay una serie de hábitos que influyen en ella como puede ser la alimentación o los entrenamientos. Por lo general, los deportistas rompen a sudar de manera rápida y la temperatura sólo registra subidas muy pequeñas que son fácilmente asumibles por el organismo.
Cuándo meterse en la ducha
Es posible que si nos metemos en la ducha nada más acabar la actividad física sigamos sudando, sobre todo cuando los ambientes son cálidos, algo que resulta bastante habitual en los vestuarios de los centros deportivos. También ocurre que si dejamos transcurrir muchos minutos existe el riesgo de resfriarnos.
Lo mejor es que esperemos a que la transpiración haya cesado, sobre todo en verano y climas húmedos, para ducharnos a continuación Cuando la temperatura sea más bien baja lo adecuado es que al finalizar el ejercicio nos cambiemos y pongamos una camiseta limpia, sobre todo si hemos entrenado con una prenda de algodón. De esta manera evitaremos sufrir un enfriamiento.
En cuanto a la temperatura de la ducha se recomienda que empecemos con agua tibia para a continuación elegir la temperatura que más nos guste. Hay que decir, que al contrario de lo que se suele pensar, cuando nos bañamos con agua muy fría no estamos cortando el sudor, ya que se produce el efecto contrario. Se suda un poco más porque la piel se enfría y el cuerpo mandará calor para conservar la temperatura.
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