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Consumir dos o más refrescos al día puede reducir la esperanza de vida de las personas

consumen dos o más refrescos al día, tanto los que contienen azúcar como los edulcorados artificialmente, vivirán menos.

Un estudio de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer da a conocer que las personas que consumen dos o más refrescos al día, tanto los que contienen azúcar como los edulcorados artificialmente, vivirán menos.

Ello está asociado con un mayor riesgo de muerte general, siempre en comparación con aquellas personas que prácticamente no toman este tipo de bebidas.

La muestra se ha realizado en 10 países de Europa a un total de 451.743 personas.  A estas personas se les hizo un seguimiento de unos 16 años, y se detectó que un mayor riesgo de muerte por enfermedades cardiovasculares a las personas que consumían dos o más vasos de este tipo de bebidas y un mayor riesgo de muerte por enfermedades de tipo digestivo.

Un dato curioso de la investigación es que tomar bebidas light y zero también comporta el riesgo que el resto de bebidas azucaradas. De hecho, el consumo de beber concretamente este tipo de bebidas se asocia a un incremento del 26% del riesgo de morir prematuramente. Se establece porque sus consumidores llevan un estilo de vida poco saludable, aunque no es una tónica general.

Del mismo estudio se concluye que el consumo de refrescos convencionales solo aumentaría en 8% el riesgo de muerte prematura. Ahora bien, los propios investigadores explican que no son estudios del todo concluyentes y no se pudo probar la relación entre el consumo de refrescos y la muerte por cáncer.

Lo que está claro es que los investigadores dieron la alerta de limitar el consumo de refrescos. Los resultados de este estudio sustentan las campañas de salud pública en marcha que apuntan a reducir el consumo de bebidas gaseosas.

Las propias empresas fabricantes de estos productos están viendo la tendencia de los consumidores que pasa por beber refrescos con menos azúcar y por tanto están en línea con estas necesidades.

Por ejemplo, han modificado las sodas reemplazando el azúcar por edulcorantes con bajo contenido de calorías. En general, están aportando toda clase de novedades y establecen colaboraciones y planes para poder reducir el azúcar en alimentación y bebidas.