OkSalud
Entrenamiento

Consejos para estirar correctamente

Cuando entrenas para hacer tus sesiones de ejercicios, una de las claves está en saber estirar correctamente. Apunta estos tips.

Es necesario estirar correctamente para que la actividad física de buenos resultados, sin lesiones. En los tiempos actuales, muchas veces se planifica un programa de ejercicios muy intenso para ejecutarse en muy poco tiempo. Es probable que en esos momentos se pase de realizar las rutinas preparatorias antes, y las de relajación para cerrar. El entrenamiento continuo lleva a agotamiento por estrés y los músculos no solo necesitan descanso. Requieren de movimientos que les devuelva el adecuado riego sanguíneo, indispensable para su regeneración.

El objetivo del estiramiento es mantener el músculo flexible y sano. Las personas son más dúctiles mientras más jóvenes son. Es por eso que este tipo de prácticas deben incrementarse con la edad.

Cuándo son beneficiosos y cuándo no

El esfuerzo exigido a los músculos al hacer ejercicios los contrae, hasta el punto de que la intensidad puede ser perjudicial. Es una de las razones que puede llevarlos a acortarse con cada repetición. Al estirar correctamente se reduce esa presión, dándoles flexibilidad y un aspecto estilizado. Y por supuesto, disminuye el riesgo de producir desgarramiento en sus fibras.

Si bien es cierto que el estiramiento es muy bueno, esto no es válido en todos los casos. Por eso deben ser evitados en situaciones de fracturas, esguinces y otras afecciones similares. Lo mismo cuando alguna articulación está inflamada o se siente dolor al mover y estirar el músculo. Otra contraindicación es padecer osteoporosis.

Claves para estirar correctamente

Como ya se mencionó más arriba, estas rutinas favorecen la irrigación sanguínea muscular. Este incremento los relaja y disminuye la contracción, lo que sirve para reducir los conocidos dolores post ejercicios. Para que sean realmente efectivos, hay que ejecutarlos en forma adecuada. Es decir, aplicarlos solo a los tejidos y articulaciones que lo requieran. Igualmente es esencial realizarlos de forma lenta y controlada.

El objetivo está centrado en hacer los movimientos más seguros. Además de incrementar la conciencia sobre el cuerpo. El límite al que se puede llegar lo impone el dolor, (no tiene que doler). Forzar el músculo solo servirá para estresarlo mucho más.

Calma y cordura

Aunque no se disponga de mucho tiempo para ejercitarse, es necesario siempre tomarse el tiempo necesario para las rutinas de calentamiento y relajación. Estos son ejercicios que deben hacerse de manera pausada, sin apuros. Saltarse esta recomendación puede dar lugar a las situaciones opuestas a las que se buscan con su ejecución. Es decir, a alguna lesión muscular.

Un último consejo: escucha siempre lo que te dice tu cuerpo. La atención permite la prevención y saber cuándo es el momento de acudir a un fisioterapeuta. Quizás sea un aviso para evitar problemas mayores.