Receta de Sorbete de limón
Sorbete de limón, sin necesidad de heladera o máquina de helado. Disfruta de un refrescante sorbete con pocos ingredientes y una preparación fácil.
El sorbete de limón es un clásico del verano sencillo, ligero y con pocos ingredientes. Este postre se servía en los banquetes después de los entrantes. Su función era limpiar el paladar para degustar los siguientes platos. Suele utilizarse con esta finalidad en las bodas y otro tipo de celebraciones, con algunas variaciones. Puede combinarse con toques de menta, de hierbabuena, de albahaca, etc. Es tan rico que viene bien tener un poco en la nevera para refrescarse en cualquier momento del día. El limón es una fruta básica en la alimentación cotidiana, pues contiene muchísimos nutrientes buenos para la salud.
Entre otras cosas, el limón aporta una alta cantidad de vitamina C. Gracias a ella, el sistema inmune se fortalece para atacar virus y bacterias. Es rico en potasio, excelente para reducir la hipertensión. Entre otras propiedades, el limón actúa como desinfectante natural, eliminando microorganismos perjudiciales de boca y garganta; mejora la función biliar y desintoxica hígado y riñones. El sorbete de limón después de una comida pesada activa la digestión. Es muy fácil de hacer y gusta a todos.
Ingredientes:
- 4 limones
- Ralladura de 1 limón
- ½ litro de agua
- 200 gr de azúcar
- 1 rama de canela
- 1 pizca de sal
- 2 claras de huevo
Cómo preparar sorbete de limón:
- En primer lugar, preparar un almíbar. Para ello colocar el azúcar y la canela en una ollita y cubrir con el agua.
- Llevar a fuego medio hasta que rompa el hervor.
- Dejar cocinar durante 10 minutos sin remover.
- Apagar el fuego y dejar enfriar por completo.
- Retirar la rama de canela.
- Exprimir los limones, mezclar con el almíbar y la ralladura.
- Colocar todo en un recipiente metálico. Llevar al congelador durante una hora aproximadamente, o hasta que empiece a congelarse.
- Mientras tanto batir las claras a punto nieve junto con una pizca de sal.
- Retirar el almíbar del congelador.
- Unir las claras con el almíbar de limón semi congelado realizando movimientos envolventes para no bajar el batido.
- Volver a colocar la preparación en un recipiente metálico y llevar al congelador hasta que solidifique.
- Servir el sorbete de limón con la ayuda de una cuchara para helados. Si se desea una textura cremosa, colocar el sorbete en la licuadora y triturar durante tres minutos.
- Decorar con hojas de menta fresca.
- Para darle un toque más fuerte, mezclar el zumo de limón con medio vaso de champaña o vino blanco dulce.
¡Este verano que no falte en tu nevera un rico sorbete de limón! A tu familia va a fascinarle la textura y el increíble sabor de este postre fresco y sano.
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