Mousse de canela
El mousse de canela es una variación del mousse tradicional, que resulta ser sencilla y deliciosa. Aunque es un plato sencillo, su presentación permite que se pueda servir en un evento elegante en cualquier reunión gastronómica. Su preparación no lleva demasiado tiempo, por lo que se puede elaborar y disfrutar en pocos minutos. A la delicadeza del mousse tradicional, hay que sumar el exquisito sabor y aroma a canela.
Este postre es una forma perfecta de que los niños ingieran un dulce saludable, que contiene un alto valor tradicional; sin tener que hacer un esfuerzo por presentarles un plato creativo y muy dulce.
El valor nutricional de este postre, radica en su alto contenido de leche, huevo y canela; alimentos necesarios para una dieta balanceada, y que aportan diversos beneficios. Este tipo de postres caseros, basados en ingredientes naturales, ayuda a bajar de peso, ya que regula y acelera el metabolismo; además contiene un bajo porcentaje de calorías, por ello resulta ideal para ingerir durante dietas adelgazantes.
Ingredientes:
- 500 mL de leche entera
- Cuatro yemas de huevo
- 90 g de azúcar refinado
- Ralladura de un limón
- Una rama de canela
- Dos placas de gelatina sin sabor
- 300 g de nata líquida o crema de leche
- 25 g de pasas
- Un poco de ron (si el postre lo van a tomar niños, puede omitirse estre ingrediente)
Cómo preparar el mousse de canela:
- Remojar durante un par de horas la gelatina sin sabor, en agua fría.
- Colocar en una olla mediana, la leche completa, la rama de canela y la ralladura de limón, a fuego lento. Dejar templar.
- Batir los huevos y el azúcar, hasta que se vuelvan espumosos. Agregar a la olla la mezcla de huevo, el ron al gusto, y subir el fuego a medio. Dejar hasta que hierva.
- Añadir la gelatina sin sabor, y menear hasta obtener una mezcla homogénea.
- Una vez mezclado, retirar del fuego y dejar que se enfríe.
- Añadir la crema de leche, o en su defecto la nata líquida. Mezclar nuevamente.
- Colar, para retirar los trozos de canela que no se hayan mezclado.
- Añadir las pasas, y removerlas con la mezcla.
- Colocar en moldes para mousse o donde se pretenda servir.
- Meterlos en el refrigerador por unos minutos, hasta que tenga una consistencia gelatinosa y contundente.
- Servir y comer frío.
Una vez lista la receta, podrás impresionar a tus invitados con este delicioso postre. Además, estos quedarán impresionados de su gran sabor, a pesar que no contiene grandes cantidades de azúcar ni grasas.
Temas:
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