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Cocina mexicana: huevos divorciados

Entre las recetas más conocidas de la gastronomía mexicana están los huevos divorciados. Aquí tienes el paso a paso.

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  • Francisco María
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Los huevos divorciados son uno de los desayunos más típicos de México. Se llaman así porque son dos huevos fritos colocados uno al lado del otro en el plato, separados por una franja de frijoles negros, refritos o chilaquiles. Un huevo se baña con salsa roja picante y el otro con salsa verde, también picante. Se pueden hacer muchas combinaciones, pero siempre un huevo con salsa roja y el otro con salsa verde, para enfatizar lo de “divorciados”.

Según algunos, la salsa roja representa a la mujer, y el verde al hombre. Esta forma de hacer los huevos nació en Ciudad de México, y se extendió a otras partes del país, sobre todo hacia el centro y el sur. Derivan de los tradicionales huevos rancheros. La idea es que la columna de en medio separe efectivamente las dos salsas y sirva de barrera entre ambas. Es uno de tantos desayunos que se pueden tomar en este extraordinario país, cuya cocina es verdaderamente abundante y rica.

Ingredientes:

Cómo preparar los huevos divorciados:

  1. Cortar a la mitad la media cebolla.
  2. En una plancha bien caliente, poner a cocinar la cebolla, los ajos, los chiles, los tomates verdes y rojos.
  3. Cuando estén bien asados, preparar las salsas: para la roja, poner en el vaso de la licuadora el cuarto de cebolla, los 4 tomates rojos, un punto d esal, un diente de ajo y los chiles serranos.
  4. Licuar, y en una sartén echar un chorrito de aceite y sofreír.
  5. Salpimentar y cocinar hasta que espese un poco. Reservar caliente.
  6. Para la salsa verde, hacer el mismo procedimiento con los tomates verdes, un diente de ajo, la otra mitad de cebolla y los jalapeños.
  7. Agregar el cilantro y licuar, sofreír durante cinco minutos y reservar caliente.
  8. Freír las tortillas, escurrir en papel absorbente.
  9. Freír los huevos de dos en dos y dar un punto de sal.
  10. Poner en los platos dos tortillas fritas, y a continuación un huevo sobre cada una.
  11. Bañar un huevo con salsa roja y el otro con la verde.
  12. Colocar en medio una columna de lo que apetezca: frijoles negros, refritos, chilaquiles, etc.

Esta receta de cocina mexicana: huevos divorciados, la puedes acompañar con más tortillas de maíz, ligeramente calientes. Si bien los mexicanos lo toman de desayuno, tú bien puedes hacerlos para la comida, ya que son un plato contundente y completo. Si no te gusta mucho el picante, puedes ponerle menos chiles. Si te ha parecido interesante esta receta, no dejes de compartirla con tus amigos y contactos.