Sube & Baja, por Jaime Peñafiel: semana del 26 de julio al 1 de agosto de 2025

SUBE: Antonio Muñoz Molina

El académico nacido en Úbeda (Jaén) hace 69 años y que lo es de número de la Real Academia Española desde 1996, cuenta en un artículo «que en las noches de insomnio las ideas o imágenes inusitadas surgen, como relámpagos, en la oscuridad». Lleva razón porque, a veces, el tema que has elegido para un artículo, para una columna, se sostiene gracias a unas cuantas noches de insomnio. Incluso, durante la noche, los detalles se manifiestan con la consistencia de lo concreto y lo verdadero que, con el despertar, se evaporan. Yo también suelo ver algunas noches de insomnio muy claro el tema de la columna de mañana, pero cuando me despierto se evapora. Porque, como escribió Virginia Woolf: «El despertar es lo que nos mata».

BAJA: Pedro Sánchez

Presidente socialista del Gobierno, por criticar a la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, por el uso durante un fin de semana del chalé propiedad de la Comunidad madrileña. ¡Qué mala memoria y que desvergüenza!, cuando él tiene a su disposición nada menos que ¡¡¡tres fincas y el palacete de la Moncloa!!! a su entera y exclusiva disposición: La Mareta, Las Marismillas –del parque de Doñana– y Quintos de Mora, en la provincia de Toledo, independiente del Palacio de Moncloa con un gran parque y dos piscinas.

La Mareta. Finca de 15.000 metros cuadrados en el municipio de Teguise, en la isla de Lanzarote, regalo del rey Husein de Jordania al Rey Juan Carlos, diseñada en los 70 por el artista canario César Manrique y que fue cedida a petición de la Reina Sofía –¡qué error, Señora, qué error!– a Patrimonio Nacional. Consideraba que mantener la propiedad era muy costoso y prefería que fuera del Estado. Hoy sería el lugar ideal para que Don Juan Carlos estuviera viviendo ahí, en España y no en Abu Dabi. Quien la disfruta hoy, ¡y cómo!, es Pedro Sánchez y su familia, hasta el extremo de que la inefable Begoña gasta un pastón en acondicionarla a su gusto.

Doñana. Situado en el suroeste de la Península Ibérica, en la Comunidad Autónoma de Andalucía, también ha sido utilizado para «descansar» por Pedro Sánchez, en el palacio de las Marismillas, de estilo colonial inglés situado en el paraje más tranquilo y privilegiado del Parque Nacional. Con playa privada y 18 suites con baño. Aquí suele pasar la segunda parte de sus vacaciones, tras su estancia en la residencia real de La Mareta. Según datos del Ministerio, el mantenimiento para su conservación supone un coste total de 432.841 euros.

Quintos de Mora. En el municipio de Los Yébenes (Toledo). Esta finca situada a sólo 155 kilómetros de Madrid abarca una superficie de 6.800 hectáreas y es propiedad del Estado desde 1942. El presidente estableció en ella su escondite para días de descanso e incluso un lugar ideal para reuniones privadas.

Como podemos ver, las vacaciones del presidente Pedro Sánchez y familia se disfrutan de palacio en palacio pagadas por todos los españoles, al igual que el Falcon, cuya utilización vale lo que no está escrito.

BAJA: Noelia Núñez

A quien pillaron mintiendo, un acto infantil de una persona inmadura que no quiso asumir la responsabilidad y sin verse coaccionada por el respeto a normas y a las demás personas, ha decidido rentabilizar su trastorno narcisista colocándose de tertuliana en un programa de mucho griterío y de mucho zasca, la que le van a dar «en el meollo de la píldora narcotizante del ocio con ínfulas». Ahí es donde ha decidido reciclarse doña Noelia optando por el faranduleo, la fama y los dinerillos. ¡Aquí sí que puede mentir sin que importe mucho!

BAJA: Dahud Hanid Ortiz

Condenado a 30 años de cárcel por el asesinato de dos cubanas y un ecuatoriano en 2016 en Madrid y conocido como el triple crimen de Usera. El asesino tenía el rango de teniente del Ejército de los Estados Unidos que buscaba vengarse del abogado peruano Salas, con quien su esposa mantenía una relación amorosa. Al no encontrarlo, asesinó a las trabajadoras Elisa Consuegra y Maritza Osorio, así como a Pepe Castillo, que casualmente pasó por el despacho para recoger un documento. Después,  prendió fuego para borrar pruebas. Detenido en Venezuela, las autoridades judiciales españolas pidieron su extradición pero se negaron a ello. Las familias de las víctimas han expresado su consternación por su liberación como parte del canje entre Washington y Caracas de supuestos «presos políticos».