Opinión

El reto de Feijóo es rescatar a España del socialcomunismo

Alberto Núñez Feijóo, nuevo líder del PP, tiene ante sí no sólo el reto de consolidar a su partido como sólida alternativa de Gobierno. En circunstancias normales, la alternancia en el poder es una prueba de salud democrática; en las actuales, la alternancia en el poder es una necesidad vital para los intereses de España, porque el daño que está causando el Gobierno socialcomunista es inmenso. Lo que está en juego trasciende en mucho a la legítima batalla partidista entre distintas formaciones. Está en juego el futuro de una nación que está sufriendo un gigantesco daño. Y es en estas circunstancias extraordinarias cuando Núñez Feijóo toma el mando de un partido que tiene la obligación de responder a los anhelos de cambio que demandan sectores cada vez más amplios de la sociedad española. La responsabilidad de Feijóo adquiere así una dimensión distinta y de mayor trascendencia, si cabe. Su trayectoria política le avala para el reto; su sensatez es un hecho probado; su capacidad de gestión ha quedado largamente acreditada. Feijóo no es ningún outsider, ni uno de esos políticos forjados a la luz de los focos de un plató de televisión. Es un político curtido que ha hecho de la eficacia y la prudencia sus señas de identidad. Todo eso es Feijóo, que ahora asume la mayor responsabilidad que puede asumir un político.

El PP es el referente político del centroderecha español, el partido que durante décadas ha encarnado los valores con los que se identifican millones de españoles. La obligación de Feijóo es devolver la ilusión y la esperanza a un electorado que hace apenas dos meses se debatía entre el desánimo y la desesperanza al comprobar cómo el partido quedó sumido en una crisis devastadora. El primer mérito que cabe reconocerle a Feijóo es su disposición a liderar una formación maltrecha. Y el acierto de liderar una transición complejísima que ha concluido con su proclamación como presidente del PP. Siendo esto difícil, lo más complicado es lo que tiene por delante: rescatar a España de un Gobierno que la tiene exangüe y literalmente triturada.