Opinión

El ocaso del sátrapa

Se acerca la fecha en que Feijóo le asestará la estocada final al psicópata. La gente de bien (que tanto odia la gentuza) respirará en paz y el Rey también, tras haber tolerado miles de abusos y faltas de consideración del demente. Libération, al conocer su abultada derrota en las urnas, suaviza los titulares: Espagne: la gauche en péril extrême (España: la izquierda en peligro extremo). En portada sale Sánchez, sonriendo, con Barbie-Díaz, para ocultar el drama. Los franchutes nos dan la enhorabuena por librarnos de un Narciso barato, de un hortera de bolera que pide el entrecôte «al punto», y no en «su punto», algo que los gabachos no toleran. Podrían agradecernos haber sacado de la circulación a una máquina oxidada de mentir y a un canalla que traicionó a España y la entregó a sus sucios socios, convencido de que con su linda sonrisa, abriría acuerdos, siendo incapaz de cerrar pactos.

Hoy le llega el ocaso a este soplapitos, como llaman a los árbitros torpes, en el Uruguay. El autócrata creyó ser dios mismo, pero el profesor Tamames le bajó los humos definiéndole como «un vendedor de crecepelo». El 23J, una mala persona, que no empatiza con nadie, saldrá de nuestras vidas, espero que para siempre. Sus incoherencias, a medida que pasaban los días, se hacían más palpables. Ya no rige, está completamente fuera de su acuerdo. ¡Que se vaya a Caracas a tomar mucho por saco, que le guste mucho y que no regrese jamás! ¡Aleluya! ¡Sánchez, kaputt!

Alejo Vidal-Quadras, otro sabio profesor, propone un cambio estructural y profundo de España para volver a nuestros sólidos principios que, sin duda, protegerá Feijóo. Los españoles necesitamos recuperar la alegría que cercenó el ruin socialcomunismo con su ideología opresora, sangrantes impuestos y frenéticas leyes, que sólo fomentan el odio. La libertad es otra cosa.

El líder del PP y candidato a la Presidencia, ya piensa en nombres para su futuro Gobierno, que tendrá nueve inútiles ministros menos, que los veintitrés ineptos de Sánchez. A Feijóo le bastarán catorce inteligentes para demostrarle a Sánchez, cómo ahorra y prospera un país que el sátrapa deja, con 1.535,262 millones de deuda. Si yo fuera Feijóo y como hijo de diplomático que soy, nombraría a Cayetana Álvarez de Toledo, ministra de Asuntos Exteriores. Nadie mejor que ella, para cargo tan relevante (que hoy okupa un pelele como Albares).