Opinión

Un buen político

Esta columna no pretende ser una crítica favorable o adversa. Es, sencillamente, la recopilación de lo que considero son doctrinas de gobierno fundamentales, que se están desvaneciendo en el desarrollo de la política actual. Recordarlas creo que puede servir para que algún gobernante –en caso de que repare en este texto- recuerde las directrices que deben regir el servicio a la vida pública.

Tras esta exposición a pecho descubierto, propongo a los políticos actuales –fundamentalmente a los que están ejerciendo en el actual Gobierno de España- que den un paso al frente si consideran que cumplen uno o más de estos requisitos. Estoy segura de que muchos lo darían (¡Pobres incrédulos cegados por su narcisismo!).

Llegará una época mejor en la que no habrá proyectos caprichosos, no habrá dos monólogos sino un diálogo y en la que Saturno (el maldito Saturno que ahora nos está devorando), en su habitual incompetencia, habrá dejado a un hijo con vida, que será el que nos saque de esta oscuridad.