Opinión

La aplicación de la Ley de Amnistía va para largo, si es que va

Todos los mensajes del Gobierno en relación con la Ley de Amnistía van en la misma dirección: lo que salga del Congreso de los Diputados no lo para nadie, ni siquiera la UE. Pues bien, la Comisión Europea ha advertido al Ejecutivo de Pedro Sánchez de que en cuanto los tribunales planteen una cuestión prejudicial ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea -una de las vías que contemplan los magistrados cuando entre en vigor la ley- la aplicación de la norma quedará  automáticamente en suspenso. La respuesta del comisario de Justicia, Didier Reynders, a una pregunta del eurodiputado Adrián Vázquez es cristalina:»La presentación de una petición de decisión prejudicial entraña la suspensión del procedimiento nacional hasta que el Tribunal de Justicia se pronuncie». «Del principio de primacía se desprende que la exigencia del Derecho de la Unión de suspender el procedimiento nacional hasta que el Tribunal de Justicia se haya pronunciado sobre la petición de decisión prejudicial se aplica con independencia de lo que la legislación nacional establezca. Por lo tanto, el órgano jurisdiccional nacional debe dejar inaplicada cualquier normativa nacional que no respete este principio». Más claro, agua.

El asunto de fondo es que Pedro Sánchez añadió a la Ley de Amnistía una enmienda que pretendía que la norma pasara por encima de la justicia comunitaria al obligar a los órganos judiciales a que «alcen de inmediato las medidas restrictivas de derechos que hubieran sido adoptadas, incluso en aquellos casos en los que se produzca una eventual suspensión del procedimiento judicial». Por tanto, Bruselas deja claro, por si alguien tenía dudas, que por mucho que el Gobierno de Pedro Sánchez haya vendido la idea de que la Ley de Amnistía no la para nadie, la norma quedará cautelarmente en suspenso y sin poder ser aplicada en España en cuanto el Tribunal Supremo plantee una cuestión prejudicial. Y lo hará, vaya que si lo hará. Aunque el Ejecutivo se esfuerce en mantener lo contrario.