Turquía estudia eliminar por ley cuatro millones de perros callejeros

La medida prevé su captura para ofrecerlos en adopción y, pasados 30 días, su sacrificio si no son acogidos

  • Antonio Quilis Sanz
  • Periodista especializado en información medioambiental desde hace más de 20 años y ahora responsable de OKGREEN en OKDIARIO. Antiguo director de El Mundo Ecológico y colaborador en temas de medioambiente, ecología y sostenibilidad en Cadena Ser.

El parlamento de Turquía está a punto de debatir si se sacrifican cuatro millones de perros callejeros que vagan sin dueño por las calles de sus ciudades. Es la voluntad del gobierno que ha anunciado un proyecto de ley para regular su presencia que ha levantado controversia entre la opinión pública.

La ley, que se espera debatir en las próximas semanas, activará un mecanismo que recuerda a otra época de la historia reciente del país euroasiático.

Sus detractores recuerdan cómo en 1910 se enviaron, desde Estambul a la deshabitada isla de Sivriada, a 80.000 perros para dejarlos morir de sed y de hambre. Una decisión tomada por el entonces sultán Mehmed V en un esfuerzo por occidentalizar la ciudad antes de la caída del Imperio otomano.

Adopción o sacrificio

Más de 100 años después, los parlamentarios turcos deberán tomar una decisión para eliminar las calles de perros sin dueño, una estampa muy común en la geografía del país, con una sociedad acostumbrada a cruzarse con gatos y perros callejeros en las áreas urbanas y rurales.

El mecanismo previsto para eliminarlos es obligar a los ayuntamientos a apresarlos y ofrecerlos en adopción durante 30 días. Según esta propuesta, se tomarán fotos a los animales callejeros para ofrecerlos en una página web del estatal durante 30 días.

Los canes serán alojados en los casi 300 refugios de los que dispone el país, con una capacidad para 90.000 animales, unos datos que hacen pensar que la eliminación será un proceso largo. De momento no hay datos de los plazos que se manejan para la puesta en marcha y finalización de esta campaña de control canina.

Si no encuentran dueño, a los perros se les sacrificará con una inyección, una medida que defiende el gobierno del Partido Justicia y Desarrollo (AKP), liderado por Recep Tayyip Erdogan.

Perro callejero durmiendo en una vía pública

Protestas masivas

Las reacciones a favor y en contra no se han hecho esperar, una medida que ya ha tenido antecedentes. En 2012, el partido gobernante AKP propuso legislaciones «para quitar a los animales callejeros de las calles y ubicarlos en refugios fuera de pueblos y ciudades». El proyecto de ley se aplazó tras una serie de protestas masivas.

Sin embargo, las agendas políticas y legislativas han ido en paralelo para acotar mucho más esta relación de los turcos con los perros callejeros, fluyendo entre promover su protección o hacerlos desaparecer de las calles.

Desde 2004, se han ido sucediendo leyes de bienestar animal, prohibiendo vender gatos y perros en tiendas de mascotas, al clasificarlos como «seres vivos» y no como productos, y se fijó un castigo de hasta cuatro años de prisión al maltrato animal.

Turcos blancos

Durante este tiempo hasta ahora, han salido normas de esterilización y registro para razas peligrosas o la obligación a los ayuntamientos para recoger los perros y enviarlos a refugios, en un país en el que sólo 294 de los 1.394 municipios tienen este tipo de instalaciones.

Erdogan exigió que los dueños de mascotas que llamó «turcos blancos», término que usa para identificar a personas laicas, occidentalistas y mayormente de izquierda, se preocuparan por sus mascotas.

Como alternativa a este sacrificio de perros callejeros en Turquía están los defensores de la esterilización, algo que no ha funcionado en el pasado y que parece a todas luces inviable.

Perros y gatos callejeros son muy frecuentes en las ciudades turcas

Esterilización

Ibrahim Yumakli, ministro de Agricultura y Bosques, publicó en las redes sociales que «se estima que el número de perros sin dueño está cerca de los cuatro millones; no se sabe con precisión porque pueden parir una o dos veces al año y tener hasta 6 u 8 cachorros, y cambian mucho de lugar».

El ministro argumentaba que «según los científicos, se puede controlar la población de perros si en un año se esteriliza el 70 %. Pero en los últimos 5 años sólo se ha conseguido una media de 260.000, con un máximo de 350.000 en un año».

Sondeos de opinión

La medida ha provocado la publicación de multitud de encuestas para conocer la opinión pública de los turcos acerca de esta cuestión, que no despeja del todo las dudas sobre cuál es el sentimiento de la población turca acerca de esta polémica.

Según destaca la agencia EFE, en un reciente sondeo del gobierno turco, un 88 % de los encuestados confirmó que en su barrio había perros callejeros, algo que un 83 % considera «un problema», mientras que la mitad aseguró conocer a alguien cercano que había sido agredido por uno de estos animales.

Un 18% está favor de la esterilización de los animales, dejándolos en la calle, mientras que un 80 % apoya el plan para llevarlos a perreras para su adopción, «sacrificando a los enfermos».

En otro sondeo, solo un 41 % ve «un peligro» en los animales callejeros (sin especificar), y solo un 16 % pide sacrificar a los perros que atacan a personas.

Salud pública

Entre los argumentos a favor de la eliminación de los perros callejeros en Turquía, apoyados y difundidos con más frecuencia por los medios de comunicación controlados por el gobierno de Erdogan, están los ataques de los perros a personas.

El argumento oficial se basa en la salud pública, que destaca que los «contactos con riesgo de contagio de rabia» se han duplicado en 2023 respecto a la media anterior. Se habla de contactos, pero no se sabe exactamente el número de casos reales de contagio reales de la enfermedad.