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Tu perro puede se hace mayor y puedes estar pasando por alto este síntoma: el aviso de los veterinarios

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

A medida que los perros envejecen, su cuerpo cambia de forma gradual, casi imperceptible para quienes conviven con ellos cada día. Sin embargo, los veterinarios insisten en la importancia de prestar especial atención a un síntoma que, a pesar de ser uno de los más frecuentes, también es uno de los más ignorados: la pupila blanquecina o azulada. El problema es que, en sus etapas iniciales, apenas se nota si no se observa al animal con buena luz.

Asimismo, muchos dueños creen que simplemente se trata de algo «normal relacionado con la edad», sin ser conscientes de que su perro podría estar perdiendo la vista. La pupila debería verse negra y brillante; cuando empieza a adquirir un tono azulado, grisáceo o blanquecino, es un síntoma de que algo está cambiando en el cristalino, la estructura interna del ojo encargada de enfocar la luz. En la mayoría de casos, las cataratas están detrás de esta pérdida de transparencia que produce el efecto de «velo» o «nube».

¡No ignores este síntoma en tu perro!

@dr.pulys La catarata en perros es una opacidad del cristalino del ojo que puede causar pérdida de visión o ceguera. Se presenta cuando el cristalino, que normalmente es transparente, se vuelve nublado u opaco, impidiendo que la luz llegue a la retina. Las causas pueden ser hereditarias, metabólicas (como la diabetes), por traumatismos, o por envejecimiento. Síntomas: Apariencia lechosa o blanquecina en el ojo. Dificultad para ver, chocar con objetos o tener problemas para encontrar juguetes. Cambios en el comportamiento, como mayor cautela o renuencia a jugar. Mayor sensibilidad a la luz o reflejos inusuales en el ojo. En casos de catarata diabética, puede haber aumento de la sed y la micción, pérdida de peso y otros síntomas relacionados con la diabetes. Causas: Cataratas hereditarias: Algunas razas son más propensas a desarrollar cataratas hereditarias. Cataratas metabólicas: La diabetes es una causa común, ya que el exceso de azúcar en sangre puede afectar el cristalino. Traumatismos: Lesiones en el ojo pueden dañar el cristalino y causar cataratas. Envejecimiento: El cristalino puede opacarse con la edad, aunque no todas las opacidades son cataratas. Otros factores: Inflamación ocular (uveítis), malnutrición y exposición a la radiación también pueden contribuir. Tratamiento: Cirugía: La facoemulsificación es la técnica más común para eliminar las cataratas y restaurar la visión, similar a la cirugía en humanos. Consideraciones: La cirugía es más efectiva cuando se realiza antes de que las cataratas avancen demasiado y puede prevenir complicaciones como el glaucoma. #casosclinicosveterinarios #medicoveterinario #mascotas #caninos #abuelo #oftalmologiaveterinaria ♬ perfect love – Ophelia Wilde

Las cataratas en los perros implican una pérdida progresiva de transparencia en el cristalino, la lente interna del ojo encargada de enfocar la luz. A medida que esta estructura se vuelve opaca, se forma una nube blanquecina o azulada que resulta cada vez más evidente para el dueño. Esta alteración dificulta la visión, reduce la capacidad de enfocar objetos y afecta la percepción de las distancias. Si no se detecta a tiempo, la catarata puede avanzar hasta provocar una ceguera total en el animal.

Las causas de las cataratas son diversas, aunque el envejecimiento es la más común. También existe una cierta predisposición genética: razas como Cocker Spaniel, Caniche, Labrador y Golden Retriever, Schnauzer, Husky Siberiano o Boston Terrier tienen mayores probabilidades de desarrollarlas. Esta enfermedad influye de manera directa en la vida diaria del perro, aunque muchos dueños no se dan cuenta de inmediato porque el animal se adapta utilizando otros sentidos, especialmente el olfato.

A medida que avanza, puede tropezar con muebles, dudar al subir o bajar escaleras o mostrarse inseguro en espacios desconocidos. También puede calcular mal las distancias, reaccionar tarde ante estímulos visuales y desarrollar ansiedad. Estas señales, que algunos interpretan como simples cambios asociados a la edad, son en realidad indicadores claros de que el animal está perdiendo la vista.

El único tratamiento eficaz para recuperar la visión es la cirugía, que consiste en eliminar el cristalino opaco e implantar una lente intraocular artificial. Si no es posible la cirugía, se aplican tratamientos para reducir la inflamación y prevenir daños secundarios, aunque estos no restauran la visión perdida.

Cómo ayudar a un perro que está perdiendo la vista

El primer paso consiste en mantener la casa ordenada, evitando cambiar los muebles de sitio o dejar obstáculos en zonas de paso. La memoria espacial del perro es una herramienta clave cuando la visión falla, y cualquier alteración puede confundirlo. También conviene mejorar la iluminación del hogar; las luces LED cálidas resultan muy útiles para que el animal se oriente mejor por la noche.

Durante los paseos, es importante llevarlo siempre con correa. Esto no implica limitar su disfrute, sino acompañarlo de manera segura. Finalmente, es fundamental reforzar la comunicación verbal; las órdenes claras y consistentes son clave para que el perro pueda guiarse más por la voz de su dueño que por la vista.