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La razón por la que los perros tienen miedo a las tormentas y cómo calmarles

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

Bien es sabido que los perros tienen un miedo atroz a las tormentas. Pero, ¿a qué se debe esto? Lo primero a tener en cuenta es que su sentido del oído está mucho más desarrollado que el de los humanos, lo que explica por qué son tan sensibles a los ruidos fuertes. A esto hay que sumar que los truenos les resultan amenazantes ya que no saben de dónde proceden ni qué son. Es importante que sepamos cómo actuar y calmarles.

El miedo de los perros a las tormentas

Por lo general, la primera reacción de los perros cuando hay tormenta es la de correr a esconderse. Tienen miedo de los ruidos fuertes y se estresan. El Doctor Austin en una entrevista con el portal animal “The Dodo”, explica lo siguiente: «Para la mayoría de los perros, el miedo o la ansiedad durante las tormentas eléctricas está asociado con el ruido del trueno».

Y añade: «A veces, cualquier parte de la tormenta (cambios de presión barométrica, lluvia, vientos fuertes) puede desencadenar una respuesta de miedo porque un perro asociará estas cosas con una tormenta que se aproxima».

Nosotros no podemos sentir cuándo cambia la electricidad estática y la presión del aire antes de una tormenta. Sin embargo, los perros sí pueden, como si tuvieran un sexto sentido, lo que incrementa su sensación de malestar.

Suelen mostrar respuestas similares a otros ruidos fuertes, como los petardos o los fuegos artificiales. Por lo tanto, se puede producir una situación como esta en cualquier momento, y nosotros debemos saber cómo calmar el miedo.

¿Qué hacer?

Ignorar el comportamiento del animal durante una tormenta no es una buena idea, según indican los expertos. El miedo del perro es real y, por lo tanto, necesita nuestro máximo apoyo. No debemos regañarle ni castigarle ya que, de ser así, la experiencia sería mucho más traumática para él.

Lo que tenemos que hacer es acercarnos al perro con compasión y ternura, e intentar que se calme. Podemos crear un lugar tranquilo y seguro, donde el animal se sienta a gusto. Debe estar lo más alejado posible de la ventana, y es conveniente de que tenga su cama y sus juguetes.

Debe ser un espacio exclusivo para el perro, una especie de refugio para él. Podemos hablar con él en un tono tranquilo y proporcionarle sonidos que le distraigan. Ahora bien, debemos evitar poner la música o la televisión demasiado para intentar disimular el ruido de la tormenta, ya que esto podría incrementar el estrés de la mascota.