Internacional

El primer ministro de Líbano propone adelantar las elecciones para apaciguar las violentas protestas

El primer ministro de Líbano, Hasán Diab, ha lanzado este sábado una propuesta para celebrar elecciones parlamentarias anticipadas en el país, en un intento de contener la ola de protestas contra la crisis política y económica del país, exacerbada por la gran explosión del martes en el puerto de Beirut, considerada como un símbolo de negligencia del Gobierno.

«Estoy preparado para asumir la responsabilidad del Gobierno durante los dos próximos meses hasta que todos los partidos acuerden la próxima fase a seguir y el lunes convocaré al Consejo de Ministros para organizar estas elecciones anticipadas», ha hecho saber en un discurso recogido por el portal de noticias libanés Naharnet.

«La explosión que sacudió al puerto se produjo debido a la corrupción», ha añadido el primer ministro, en consonancia con la opinión de los manifestantes que ahora mismo están ocupando varias sedes del Gobierno en Beirut y protagonizando fuertes enfrentamientos con la Policía, que de momento se saldan con un agente muerto, otras 142 personas heridas y asaltos a los ministerios de Exteriores y Comercio.

Horas antes de este anuncio, los diputados del partido cristiano Kataeb anunciaron su abandono del Parlamento libanés como protesta contra el Gobierno, según hizo saber el líder de la formación, Sami Gemayel.

Las tres renuncias del partido cristiano llegaron después de las de Marwan Hamade, del partido del líder druso Walid Jumblat, y la diputada independiente Paula Yacoubian, quien pidió a todos los diputados que dimitan porque «el Parlamento ya está fuera del proceso de toma de decisiones».

El embajador de Líbano en Jordania también ha presentado su dimisión a raíz de la explosión, que ha dejado un saldo de 158 muertos y más de 6.000 heridos, y es considerada como un símbolo de la incompetencia del Gobierno.

La explosión, según las investigaciones iniciales, fue provocada por el almacenamiento inadecuado de 2.750 toneladas de nitrato de amonio en el puerto, incautadas en 2014 al buque Rhosus, de un empresario ruso y con pabellón moldavo, por impago de las las tarifas portuarias.