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El Supremo de Maduro ordena arrestar a Milei por «robar» un avión con pasajeros de Venezuela e Irán

El avión estuvo retenido en Buenos Aires por los supuestos vínculos de los tripulantes con el terrorismo

La narcodictadura de Maduro acusa a Milei de ser "un peligro brutal para todo el hemisferio"

El Tribunal Supremo de Justicia de Nicolás Maduro ha solicitado formalmente este lunes una orden de arresto contra Javier Milei tras la petición de la fiscalía general del régimen chavista. La narcodictadura acusa al presidente de Argentina de un delito de «robo» por el caso de un avión que quedó retenido en Buenos Aires en el año 2022 con 19 pasajeros de Venezuela e Irán. Fueron detenidos, en un inicio, por supuestos vínculos con el terrorismo. Finalmente, el aeroplano fue enviado a Estados Unidos este 2024.

La pasada semana, Tarek William Saab, fiscal general de Venezuela, anunció el inicio de los trámites contra Milei, así como contra la secretaria general de la Presidencia Karina Milei y la ministra de Seguridad Patricia Bullrich. A todos les vincula con delitos como «robo agravado», «privación ilegítima de libertad» e «interferencia ilícita en la seguridad operacional de la aviación civil», entre otros, según la Sala de Casación Penal del Tribunal Supremo de Justicia venezolano.

El avión en cuestión pertenecía a la aerolínea venezolana Emtrasur Cargo. Con la sospecha de que se utilizaba para el desarrollo de operaciones encubiertas en la región, el Departamento de Justicia de Estados Unidos reclamó la aeronave. Se retuvo en Buenos Aires en junio de 2022, con 19 tripulantes venezolanos e iraníes que fueron detenidos en un principio por sus supuestos vínculos con el terrorismo. Hasta febrero de este año no ha sido desplazado hasta el país norteamericano.

«Peligro para todo el hemisferio»

Tarek William Saab declaró al anunciar las investigaciones que Milei «se ha convertido en un peligro brutal para todo el hemisferio», un mandatario «fascista» y «neonazi» que aplica un «programa de violencia institucional premeditado» contra la población argentina.

Asimismo, informó de la designación de un «fiscal especializado en materia de protección a los derechos humanos para que adelante las investigaciones correspondientes» contra Milei y Bullrich. Insinuó que no cerraba la puerta a pesquisas por crímenes de lesa humanidad, tras condenar «ataques» contra ancianos y jóvenes durante las manifestaciones contra el Gobierno: «Milei es el violador de derechos humanos más feroz del continente».

Argentina se ha desvinculado de cualquier acusación y ha condenado todos los pasos de la Fiscalía de Maduro, a la vez que ha recordado que el asunto fue resuelto por el poder judicial «independiente», en referencia al sistema argentino. También ha subrayado que en Argentina «impera la división de poderes y la independencia de los jueces», para destacar que no es así como se obra en Venezuela, «lamentablemente».

«La República Argentina repudia las órdenes de aprehensión dictadas por el fiscal general de la República Bolivariana de Venezuela contra el presidente de la Nación, Javier Milei, la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y la ministro de Seguridad, Patricia Bullrich, a raíz del incidente del avión de la empresa Emtrasur», explicaron en un comunicado.

La relación entre Argentina y Venezuela es más tensa en los últimos tiempos por la condena pública del Gobierno de Milei al pucherazo de Maduro. El argentino instó a la Corte Penal Internacional (CPI) a solicitar el arresto del dictador venezolano y «otros cabecillas del régimen» ante «el agravamiento de la situación» tras las elecciones presidenciales del 28 de julio. Desde entonces, el salvajismo de la represión del régimen chavista contra los demócratas sólo ha ido en ascenso.