¿Cómo se hace?
Belleza

Los trucazos para limpiar un rodillo de jade, el utensilio de moda

Tras unos años en los que prácticamente habían desaparecido de la industria cosmética, los rodillos de jade están otra vez de moda. Este producto de belleza natural y holística fue diseñado para relajar el rostro a través del masaje de los músculos, ayudando a que la piel absorba las cremas y las lociones que se aplican en ella. Por esto los pasos para limpiar un rodillo de jade resultan importantes.

Si no lo limpias a menudo corres el riesgo de que la suciedad penetre tu piel y eso cause indeseables reacciones cutáneas. Son tres los pasos básicos para quitar todos los restos que se quedan en estos rodillos y esto no te llevará más que unos minutos dejarlo como nuevo. Si tienes dudas siempre puedes ponerte en contacto con el fabricante para saber los detalles.

Trucazos para limpiar un rodillo de jade

Paso 1, lavar el rodillo

Éste es el procedimiento más simple de los tres pero también el que más regularmente deberás realizar para cuidar tu rodillo de jade. Quita la piedra de jade del rodillo, y usa el pulgar y el índice para sostener el lado derecho con la mano derecha. Mientras lo haces, tira de la piedra hacia la izquierda pero sin mover la barra del rodillo de su lugar. Una vez fuera de su sitio la piedra, prepara una mezcla de agua con amoníaco y jabón para trastes -80%, 10% y 10% respectivamente-, sumerge un paño y limpia la piedra.

Deberías evitar los jabones abrasivos y limpiadores como alcohol porque pueden provocarle daños irreversibles a la piedra de jade.

Paso 2, desinfectar el rodillo

No necesitas desinfectar el rodillo todas las semanas, pero no estaría mal hacerlo al menos una vez al mes. Si lo utilizas seguido, podrías hacerlo una vez a la semana para no tener problemas. El alcohol y el agua hirviendo son los mejores elementos para desinfectar rápidamente tu rodillo de jade. Puedes aplicar alcohol en un paño o recurrir a las clásicas toallitas con alcohol.

Te recomendamos colocarte guantes para impedir que estos compuestos químicos afecten a tu piel durante la desinfección.

Paso 3, secar el rodillo

El secado del rodillo no puede hacerse de cualquier forma. Hay que frotar la pieza con un paño seco para retirar los productos implicados en la limpieza. Esto es indispensable para que los desechos del jabón no queden atorados en los poros del rodillo.

Es aconsejable tener a mano paños vegetales suaves, especialmente si eres alérgico a los artículos de limpieza típicos.