¿Cómo se hace?
Aceites esenciales

Todas las maneras de usar el aceite esencial de neroli

En los últimos años, el aceite esencial de neroli se ha convertido en uno de los productos estrella de la industria cosmética a nivel internacional. Múltiples son sus beneficios para quienes lo incorporan en los tratamientos que realizan, siempre que se sepa cómo utilizarlo bien. Considerando ese requisito indispensable, hoy vamos a enseñarte cómo usar el aceite esencial de neroli y aprovecharlo mejor.

En principio, es importante aclarar para quien no esté al tanto, que este aceite se obtiene mediante la destilación de las flores blancas del árbol de naranjo amargo, o bien flores de azahar, resultando un ungüento que destaca por su aroma floral suave con fondos cítricos.

Maneras de usar el aceite esencial de neroli

Por su composición y las propiedades que ésta supone, el aceite esencial de neroli también es muy popular en la medicina tradicional. Suele incorporarse para calmar el dolor y reducir la inflamación, sobre todo en mujeres que atraviesan el inicio de la menopausia.

Sin embargo, para que estos beneficios realmente existan, es imprescindible que la recogida de las flores se realice con máximo cuidado. Deben recolectarse del Citrus aurantium sin magullarlas, y el proceso de extracción del aceite tiene que llevarse a cabo de inmediato.

Dicho eso, los profesionales de la salud explican que debería ser aplicado siempre y cuando sea sólo como complemento de otras técnicas. Bajo ningún punto de vista, recomiendan que sea la única terapia paliativa contra las molestias y la inflamación porque sigue siendo estudiado para comprobar si actúa con la misma efectividad cuando se abandonan los métodos básicos indispensables.

Usos comunes de este aceite

Independientemente del objetivo que se persigue, el aceite de neroli se esparce sobre la piel acompañando con masajes en toda la zona. Los movimientos permiten que se introduzca en las capas internas del cuerpo y que sus activos naturales trabajen con mayor celeridad.

Tienes que colocarlo en las regiones en las que sientes el dolor o la inflamación, y repetir ese proceso varias veces al día, dejando caer algunas gotas de aceite, cinco aproximadamente, y haciendo círculos lentos con los dedos para que penetre la piel y dé sus beneficios.

En los casos en los que la molestia o hinchazón sea interna, como en el de las mujeres menopáusicas, debe desparramarse en puntos específicos. Entre ellos las muñecas, el cuello y detrás de las orejas para que su aroma agradable y relajante aplaque esos síntomas.