Valls se reivindica como el «voto útil» para evitar la victoria del independentismo

Ha alertado de las consecuencias que puede tener que la ANC haya ganado las elecciones a la Cámara de Barcelona, lo que cree que «pone de relevo la desorientación de los empresarios del país que en un 96% han ignorado las elecciones» en esta institución.

«Es una situación que confirma que desgraciadamente no iba desencaminado cuando alerté de la falta de compromiso de algunas élites públicas. Hay gente que ha dado la batalla pero hay gente a la que no le importaba demasiado lo que pasara en la Cámara», ha lamentado.

Asimismo, ha advertido que, tras la victoria de la candidatura de la ANC, la Cámara de Barcelona «será una palanca potentísima para avanzar en el tema del independentismo y si alguien piensa lo contrario se equivoca».

«Entrarán estos independentistas radicales en la Fira, en la Zona Franca, en Turisme de Barcelona, en bancos y consorcios muy importantes para nuestra economía. ¿Pensáis que no tendrá ninguna consecuencia?», ha avisado, y ha subrayado que esto forma parte de una estrategia de la ANC de ocupar estas instituciones.

Por eso, ve imprescindible que no ocurra lo mismo en el Ayuntamiento de Barcelona y cree que él es el único que puede evitarlo: «Si no queréis la alianza entre Ernest Maragall y Ada Colau, hay un voto útil y este voto útil lo represento yo».

«Tenemos que actuar»

El exprimer ministro francés se ha comprometido a «atraer nuevamente» las empresas que tras el 1-O trasladaron su sede social fuera de Cataluña.

Considera que estas empresas se fueron de Cataluña en «momentos de máxima incertidumbre» y que ahora es el momento de que desde el Ayuntamiento de Barcelona se intente reconstruir la confianza empresarial para que vuelvan.

Valls ha sostenido que las inversiones extranjeras han caído en Barcelona y han aumentado en Madrid, por lo que cree que el consistorio debe actuar para cambiar la dinámica: «Ahora no nos tenemos que limitar a lamentarnos. Tenemos que actuar y la primera cosa que tenemos que hacer es asegurarnos que Barcelona no pase a ser como propone el señor Maragall: una palanca del independentismo».

Ha acusado al independentismo y al Govern de intentar restar importancia a la marcha de empresas, y los ha tildado de irresponsables: «¿No tiene consecuencias para Barcelona lo que se está haciendo? Una Generalitat que no se ocupa de los problemas de los catalanes, una tensión permanente con el Gobierno o hasta con el Ayuntamiento de Barcelona», ha cuestionado en un desayuno-coloquio en el Forum Europa Tribuna Cataluña.

También ha sostenido que «ya no hay liderazgo ni en la Generalitat ni en el Ayuntamiento», por lo que asegura que es la alternativa para ejercer este liderazgo y evitar que Barcelona esté al servicio del independentismo.