España
Juicio al 'procés'

Urkullu dice que Puigdemont declaró la independencia porque «se le estaban rebelando»

Sigue en directo el juicio del procés en el Tribunal Supremo hoy, 28 de febrero

El expresidente catalán Carles Puigdemont comunicó al lehendakari Íñigo Urkullu que renunciaba a convocar elecciones para evitar al DUI, porque los manifestantes se le estaban «rebelando» ante el Palau de la Generalitat y tenía «presión» de su grupo parlamentario.

Así lo ha revelado este jueves el lehendakari en su declaración como testigo en el juicio por el procés, en la que ha detallado que hizo «labores de intermediación» entre Puigdemont y el Gobierno a petición de numerosas personas, entre ellas el exconseller de Empresa Santi Vila, que afronta siete años de cárcel por los delitos de desobediencia y malversación.

Según Urkullu, a raíz de sus gestiones se alcanzó un «acuerdo» la madrugada del 25 al 26 de septiembre para que el Govern convocara elecciones autonómicas y evitara así sacar adelante la DUI.

Durante su mediación, ha precisado el lehendakari, Puigdemont «compartía la reflexión» de que «en modo alguno tenía deseo de proceder a la DUI», lo que pudo constatar cuando dejó en suspenso la declaración de independencia en su intervención del 10 de octubre de 2017 en el pleno del Parlament.

Hacia las 10 de la mañana del 26 de octubre, una hora antes de la rueda de prensa que Puigdemont había convocado inicialmente para anunciar las elecciones, Urkullu habló por teléfono con el entonces presidente de la Generalitat durante «casi una hora», en la que constató que seguía vigente el acuerdo de evitar la DUI.

Sin embargo, ha relatado el testigo, hacia las 14,00 del mediodía Puigdemont le comunicó, «lamentándolo», que «no podía proceder al acuerdo» de convocar elecciones porque «las personas que estaban manifestándose en la plaza Sant Jaume se les estaban rebelando y también tenía presión en su grupo».

Al día siguiente, el Parlament aprobó, en una votación secreta, la resolución de declaración de independencia y el Gobierno activó el artículo 155 de la Constitución y convocaba elecciones autonómicas.