España

La UCO desvela que UGT y CCOO usan una trama común para quedarse fondos de formación en Extremadura

UGT y CCOO han participado en una trama de desvío de fondos de formación en Extremadura cuyo impacto podría superar los 100 millones de euros, según la acusación popular del PP. La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil acaba de desvelar en su investigación que ambos sindicatos han operado, además, con una red conjunta de empresas encargada de elevar falsamente el coste de los servicios de formación prestados a los trabajadores y parados con el fin de quedarse el inflado de las facturas.

osteriormente, el dinero -cargado a las subvenciones públicas que concedía el Gobierno socialista de Fernández Vara y de su predecesores del PSOE- se ha desviado durante años a Madrid con el fin de costear los gastos generales de ambos sindicatos, tal y como refleja el informe de la Fiscalía y de la Guardia Civil (UCO) a los que ha tenido acceso OKDIARIO.

El informe de la UCO revela con claridad como una de las empresas usadas por el organismo encargado de los cursos de formación en CCOO -el FOREM- era ECT: “A través de comprobaciones realizadas por esta Unidad, se observa que ECT figura entre los mismos [entidades y centros de formación con los que FOREM colabora]. Este hecho da a entender que es una empresa con la cual FOREM pudiera poseer algún tipo de vinculación”.

Acto seguido la UCO apunta que “a través de su propia página web, se obtiene que ECT, a través de sus asociados forma a más de 200.000 alumnos, tiene convenios con más de 15.000 empresas y colabora con la impartición de formación continua y ocupacional con numerosas instituciones, agentes sociales y empresas”. Y entre ellas, la Guardia Civil llama la atención sobre los convenios que mantiene con CCOO y el FOREM, pero también con el otro sindicato implicado en la trama de desvío de fondos de formación en Extremadura: “UGT” y su organismo encargado de los fondos de formación, “IFES”.

CCOO también inflaba facturas

Hay que recordar que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha puesto la lupa en el sindicado Comisiones Obreras (CCOO) tras encontrar, de hecho, un esquema similar al de UGT, con una red de sociedades que inflaban las facturas de los servicios y que permitían que este otro sindicato -ligado históricamente a IU y ahora apadrinado por Podemos- absorbiese fondos de formación de Extremadura y los destinase a pagar sus propios gastos en la estructura nacional del sindicato.

Así, la investigación cuenta ya con pruebas de que ambos sindicatos idearon un mecanismo de latrocinio y desvío de los fondos de formación regionales que, pese a que legalmente debían acabar en los trabajadores y parados, sin embargo, fueron destinados a financiar las estructuras nacionales de los dos grandes sindicatos de este país, tal y como investiga la Justicia en la trama extremeña.

Tanto la Fiscalía como la UCO han confirmado la existencia de una estructura societaria comandada por Forem -la división de formación de CCOO que se dedica al fomento del “estudio y la investigación en materia de empleo y formación profesional y social”- y por una compañía que realizaba subcontrataciones de forma sistemática para poder acceder al dinero de los fondos. Esta empresa era precisamente ECT: la Escuela de Conducción y Transporte.

Los informes judiciales señalan sobre esta empresa que está “radicada al parecer en Getafe”. Y que “acerca de su posible vinculación con la Fundación Forem” de CCOO, resulta que “tras comprobar 31 acciones formativas (con empresas y autoescuelas ya mayoritariamente extremeñas) habría podido acceder a un beneficio de 39.666,83 euros (de los 191.411,41 € que luego justifica Forem Extremadura por esas acciones formativas que le subcontrató). Del análisis policial resulta que directamente ECT no aportaría ningún bien ni servicio formativo, sino que se trata de una empresa que obtiene tal ganancia actuando como mera intermediaria sin aportar valor añadido”. En este caso, por lo tanto, el nivel de desvío ilegal de fondos podría superar el 20%.

La mecánica era exactamente la misma que mantenía UGT: introducía sociedades que inflaban los costes para llevarse parte del dinero destinado a fondos de formación por el Gobierno socialista de Guillermo Fernández Vara. La UCO ha partido de ese caso y ha detectado, además, que, lejos de ser un ejemplo aislado, un elevado número de gastos de los cursos de formación financiados por las subvenciones públicas están plagados de irregularidades.