España
Crisis del coronavirus

Sánchez miente: justifica su pacto con Bildu pese a no necesitar su abstención para prorrogar la alarma

El presidente del Gobierno culpa al PP de que los socialistas "abrieran la espita" para negociar con los proetarras

Reconoce que el acuerdo para derogar la reforma laboral "no tiene nada que ver con la salud pública"

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha lanzado otra mentira este sábado para justificar su pacto con los proetarras de EH Bildu en la votación de la quinta prórroga del estado de alarma el pasado miércoles. En su habitual comparecencia en Moncloa, ha llegado a decir que «el Gobierno no tenía garantizada la mayoría en esa votación» al ser preguntado expresamente por el polémico acuerdo firmado por PSOE, Podemos y Bildu sobre la derogación «íntegra» de la reforma laboral impulsada por el PP.

Se da la circunstancia de que con el voto favorable del PNV y Ciudadanos, el Ejecutivo de PSOE y Podemos no necesitaba la abstención de los proetarras de Bildu para sacar adelante su quinta prórroga del estado de alarma hasta el próximo 7 de junio. Sin embargo, los socialistas llegaron a firmar con la marca política de los herederos de ETA un compromiso para derogar la reforma laboral.

«El Gobierno no tenía garantizada la mayoría en esa votación. Si no hubiésemos tenido la aprobación, mañana cualquier vecino de Madrid podría coger su coche e irse a Murcia. Necesitamos garantizar una restricción de la movilidad», ha señalado Sánchez, insistiendo en que el estado de alarma es la «única figura constitucional» para tal fin, pese a la existencia de otras alternativas, como defiende la oposición.

Una sexta prórroga

Además, Sánchez, que no ha descartado solicitar a la Cámara una sexta prórroga del estado de alarma, que sería de aplicación por territorios, ha admitido que pactó con Bildu la derogación de la reforma laboral del el PP pese a que esta cuestión no tenía «nada que ver con la salud pública».

Aquí, Sánchez, siguiendo el argumentario socialista de las últimas horas, ha culpado al PP de su pacto con los proetarras y ha calificado de «hecho insólito que el segundo partido con más escaños votase y pusiera en riesgo la seguridad sanitaria» de los españoles. «Esa posición hace que se abra la espita en la interlocución a otros debates que nada tienen que ver con la salud pública: compromisos de legislatura, de investidura, de financiación, derogación de leyes… todo eso se podía haber evitado con el voto a favor o la abstención del Partido Popular», ha declarado el jefe del Ejecutivo.