España
Reunión con verificador

Sánchez avala al verificador para negociar con Junts en Ginebra pero oculta su identidad

Sánchez apunta que el verificador es "bueno" en los casos en los que "dos no se entienden"

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha confirmado en una entrevista este jueves que la reunión que este sábado, 2 de diciembre, tendrá la figura de un verificador que ha descrito como algo «bueno» pero «mecanismo excepcional» y que se «sabrá su nombre» pero ha evitado mencionarlo.

Sánchez ha explicado que aún no conocen quién será el verificador porque lo están «estudiando entre dos organizaciones». Aunque aún no ha verbalizado el nombre de la persona que ejercerá esa función, sí ha confesado que «se conocerá la persona que mediará».

El socialista ha avalado la figura del verificador porque, a su juicio, permite que «desde posiciones tan dispares» se hayan podido citar a «hablar, dialogar y acordar». Aun así, ha concedido que la figura del mediador se trata de «un mecanismo excepcional» porque que «la situación de Junts y ERC también es excepcional».

El líder del Ejecutivo ha mostrado su deseo de que «no necesitemos este sistema de verificación» porque significaría que se ha «construido una confianza».

El presidente del Gobierno ha confesado que el motivo por el que ha cambiado de opinión son las elecciones. «Lo que ha pasado es el 23 de julio», ha admitido Sánchez. Y si ha tomado esta decisión es porque se le ha presentado la dicotomía de que «o entraba un gobierno progresista» o «entraba un Gobierno del PP con Abascal». «En política como en la vida hay que decidir», ha concluido.

La razón por la que antes veía como inconstitucional la ley de amnistía es que la norma «que presentaron los independentistas en la pasada legislatura» sí que era contraria a la Carta Magna. Sin embargo, la «que ha presentado el PSOE»,  según ha expresado como representante de su formación, sí que sería constitucionalmente viable.

Sánchez ha expresado que aunque la amnistía «probablemente no era el paso siguiente» en su ruta con Cataluña, sí que lo ha considerado «coherente y consecuente» con las decisiones que ha venido tomando en la región. El presidente del Gobierno ha puesto en valor su mandato diciendo que «no hay más que darse un paseo por Cataluña para ver que tenemos una mejor situación que en 2017».

Pedro Sánchez ha negado que el porvenir de España se vaya a decidir en Ginebra en la reunión con verificador entre el PSOE y Junts. «El futuro de este país se decide en las cortes generales», ha recalcado el jefe de Gobierno. Ha defendido estos encuentros diciendo que son para «hacer política» entre dos partidos.

Ha apuntado que el pacto que firmaron ambas formaciones tienen diferentes formas de ver el país. «El punto de partida de cada uno», ha señalado el presidente, «tiene posiciones muy distintas».

«Se han instrumentalizado instituciones»

Además, Pedro Sánchez ha tratado el tema del lawfare. «Se han instrumentalizado instituciones públicas en nuestro país, definitivamente», ha expresado abiertamente el socialista. El líder del ejecutivo ha señalado directamente al Partido Popular por utilizar «la policía, para perseguir adversarios políticos y para ocultar pruebas en causas judiciales» que afectaban a esa formación.

«Hemos hablado de hacer dos comisiones de investigación», ha destacado Sánchez. Y ha reducido el impacto que puedan tener las comisiones: «Sus conclusiones no cuestionan las sentencias judiciales». «Sí pueden ser objeto de informe a la fiscalía para que las tenga en consideración», ha especificado.