Prohibir los vuelos domésticos sólo reduciría un ¡0,1%! las emisiones de CO2, señalan los ingenieros
El Colegio Oficial de Ingenieros Aeronáuticos de España (Coaie) ha salido al paso de la propuesta que PSOE y Sumar han incluido en el pacto de Gobierno que este martes presentaron, el pacto para prohibir los vuelos cortos cuando haya alternativa de dos horas y media en tren, es decir, buena parte de los trayectos peninsulares. Los profesionales de la aeronáutica ofrecen datos que ilustran lo que esa medida supondría: esta prohibición supondría, en el mejor de los casos, una reducción de las emisiones de CO2 en España de ¡¡sólo un 0,1%!! Es decir, que al precio de dañar de forma sensible la industria del transporte aéreo en España, los efectos en las emisiones netas serían prácticamente nulos.
No hay que olvidar que España es el segundo destino turístico del mundo, y buena parte de los visitantes que alimentan y dinamizan la economía nacional llegan a nuestro país y se desplazan por él en avión, medio de transporte que Yolanda Díaz quiere minimizar con la aquiescencia de Pedro Sánchez. La vicepresidenta en funciones subrayó este martes que «tren está llamado a ser el transporte del siglo XXI» porque «no hay planeta B», en la presentación de ese acuerdo de Gobierno.
Los ingenieros aeronáuticos explican que esa prohibición causaría «cuantiosos» daños en la industria aérea y pondría en riesgo el desarrollo de los hubs de Madrid y Barcelona, polos fundamentales en el desarrollo económico de España. Y todo para reducir las emisiones en un nimio 0,1%. Así, estiman que, de materializarse, esta supresión de vuelos se convertiría en una oportunidad «de la que otros aeropuertos europeos sacarán un indudable beneficio», dado que la intermodalidad entre el tren y el avión está «muy lejos de ser eficiente en la actualidad» en España.
«Desincentivará inversiones»
El Coiae responde así al compromiso de reducir los vuelos de corto radio con alternativa ferroviaria de menos de dos horas y media, salvo en los casos de conexión con aeropuertos que enlacen con rutas internacionales, que han plasmado PSOE y Sumar en su acuerdo de programa de Gobierno de coalición.
El Colegio de Ingenieros, en un comunicado, alega «no entender» que se tenga que recurrir a prohibiciones con «efectos negativos no evaluados» cuando «está demostrado» que los viajeros se decantan libremente por el transporte más barato y existen conexiones, como es el caso de Madrid-Valencia, donde el transporte ferroviario acumula el 90% del mercado.
Por tanto, estiman que esta prohibición «solo desincentivará las inversiones en nuevas tecnologías» para el desarrollo de aviones eléctricos o de hidrógeno, para el que el banco de pruebas está en los vuelos de corta distancia.
El Coiae también ha expresado que «la medida más efectiva» para la reducción de emisiones del transporte aéreo es el apoyo a la producción y comercialización «a precios razonables» de los combustibles sostenibles de aviación (SAF, por sus siglas en inglés).