El PP presentará en Bilbao una ordenanza para prohibir los homenajes a etarras

El PP de Vizcaya quiere que todos los ayuntamientos de la provincia aprueben una ordenanza que prohíba los homenajes a los presos etarras cuando salen de la carcel, los polémicos ‘ongi etorris’ que las víctimas del terrorismo están viendo como una auténtica humillación.

El PP quiere, además, que se evite el uso de la simbología terrorista, lo que llaman «terrorismo de cartelería» que, junto con las pintadas, cubren las calles de ciudades como Bilbao. Estas ordenanzas serían «una herramienta» para poder «limpiar» la ciudad.

Raquel González, presidenta del PP vizcaíno, ha presentado hoy junto al presidente de la Asociación Dignidad y Justicia, y parlamentario en la Asamblea de Madrid, Daniel Portero, esta iniciativa, traducida en una moción que se debatirá en el pleno del 26 de septiembre en Bilbao. Será el primer paso antes de llevarla a todos los ayuntamientos vizcaínos.

La moción tiene por objetivo la elaboración de una ‘Ordenanza de memoria, dignidad y justicia con las víctimas del terrorismo».

Raquel González ha recordado que en la campaña de elecciones municipales ya anunciaron que iban a presentar esta ordenanza, por lo que esta moción significa «el compromiso real que tiene este partido para con las víctimas». Según ha subrayado, «de ser aprobada, será la primera ordenanza que exista en toda España como tal para recordar la memoria, la dignidad y la justicia para con las víctimas del terrorismo, lo que nos convertirá en pioneros a los bilbaínos».

«Ciudad de valores»

La dirigente popular ha dado «por hecho», incluso «antes de las votaciones», que su iniciativa saldrá adelante, porque el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, «siempre que puede sacar a relucir que Bilbao es una ciudad de valores, y qué valor hay más importante que el respeto». En ese sentido, ha apelado al apoyo de «los constitucionalistas», porque «la suma da» y «solo quedarían los de siempre, Bildu, que siguen defendiendo y siendo los herederos del terrorismo».

González ha señalado que esta ordenanza puede tener «líneas parecidas con la ordenanza de fiestas que habla de impedir cartelería y homenajes expresos a los terroristas». Sin embargo, ha añadido, «además de quedarse sólo para época de fiestas, no ha sido muy efectiva porque hemos tenido que tirar de la Audiencia Nacional para poder retirar algunos de los carteles que se encontraban en las zonas de fiestas».

Tras criticar que el alcalde utiliza como excusa «que sea el poder judicial el que se moje», González ha afirmado que si Aburto «no utiliza la ordenanza de fiestas, ahora tendrá también esta ordenanza de dignidad, justicia y memoria para las víctimas, para tener una herramienta más que nos de a los bilbaínos un poco de libertad en este sentido, y no tener que esperar a que se judicialice todo».

La portavoz popular ha considerado que «no utilizar las ordenanzas que a otros bilbaínos nos obligan a cubrir, no son más que excusas para el alcalde, que ahora ya tiene dos herramientas para poder limpiar Bilbao de todo este terrorismo de cartelería y pintadas».

Sonrojo

«A los bilbaínos nos cansa sonrojarnos continuamente por ser siempre noticia en fiestas, como vimos en el chupinazo, por toda la cartelería y las soflamas que seguimos viendo, y no queremos que haya ni más impunidad, ni más blaqueamiento, ni más humillación a la memoria de las víctimas», ha advertido.

Por ello, ha indicado que la ordenanza que presentan recoge cinco punto «muy claros y concretos». Así, proponen colocar placas «visibles» en cada lugar de Bilbao donde ha se ha comedido un asesinato terrorista; impedir homenajes a terroristas porque «no podemos permitir que las calles sean asaltadas por esos energúmenos para ensalzar lo que tanto daño hizo a esta tierra»; y sancionar con la suspensión inmediata por un periodo de diez años a la organización o colectivo que exhiba carteles, eslóganes o símbolos que apoyen el terrorismo.

Además, plantean que toda organización que reciba subvenciones deberá condenar expresamente el terrorismo, marcando en el impreso de solicitud si o no en una casilla con el texto «¿Su organización condena el terrorismo?», así como que se implante en el servicio de limpieza un protocolo de coordinación con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para «la limpieza y retirada inmediata de pintadas y carteles que apoyen el terrorismo o a los terroristas».

«Cada vez que aparezca una pintada o un cartel tenemos que conseguir que desaparezca en 24 horas», ha advertido González, para indicar que con esta ordenanza pretenden que Bilbao sea «la primera ciudad comprometida realmente con el respeto a las víctimas, con la convivencia en la ciudad y con la libertad de todos los ciudadanos». «Queremos que Bilbao llegue a ostentar el título de ciudad libre del terrorismo», ha remarcado.

Por su parte, Daniel Portero ha destacado su vinculación con Bilbao porque tiene familia en la Villa y porque quienes asesinaron a su padre «son del Casco Viejo de Bilbao», y ha considerado una obligación suya «como víctima del terrorismo y como ciudadano, el estar preocupado por asuntos como que exista una limpieza, pero real, de impunidad del terrorismo en Bilbao».

Según ha considerado, la ordenanza propuesta por el PP de Bizkaia «puede tener una aplicación, no solo provincial o autonómica», sino también «a nivel nacional». A su juicio, es una iniciativa que forma parte de «una España Suma, donde en determinados asuntos tan importantes como es la deslegitimación del terrorismo existen partidos constitucionales que son capaces de apoyar este tipo de mociones». Por ello, ha confiando en que «todos los partidos constitucionalistas apoyen esta iniciativa de cara a su aplicación y extensión a todos los municipios de España».

Evitar los tribunales

Por otro lado, ha considerado que «la vía judicial, la vía penal, siempre debe ser la última a utilizar, porque cuando la utilizas es porque no existen herramientas anteriores para poder aplicarlas». Pero, según ha destacado, esta ordenanza que plantea el PP en el Ayuntamiento de Bilbao es «la herramienta para no tener que llegar a la vía penal».

Tras lamentar que en la pasada Aste Nagusia de Bilbao «hemos tenido que denunciar los actos de enaltecimiento y la colocación de fotos de los asesinos de nuestros familiares, de los de mi padre y de tantísimos», Portero ha señalado que, «al final, fue el Juzgado de la Audiencia Nacional el que retiró esas fotos, pero esa debe ser la última vía».

Portero ha pedido al PNV y al PSE que apoyen este tipo de ordenanzas porque, «en el fondo, es limpiar Bilbao, y si se presume de una ciudad limpia, como es Bilbao, limpiemos no solo las calles sino también la dignidad de las víctimas del terrorismo».

En relación a la intención del lehendakari, Iñigo Urkullu, de lograr «una reflexión crítica» del pasado que incluya la violencia de ETA y sea compartida, por primera vez, por todas las fuerzas políticas, Raquel González ha afirmado que «todo lo que sea dar pasos en reconocer el daño sufrido, en reconocer a las víctimas y en tratar de salir adelante en la memoria, la dignidad y la justicia, y en resolver los 300 asesinatos que quedan sin resolver es bienvenido». «Pero como estamos en campaña, llega el momento de la máxima ambigüedad del PNV, y de que se presente como el PNV moderado y el bueno de la película».

En ese sentido, Daniel Portero ha afirmado que «el fracaso» de la Ponencia de Paz y Convivencia «viene del origen, con el nombre, porque en el País Vasco nunca ha habido paz, sino que ha habido dos bandos: el que ponía la nuca y el que disparaba».

«El problema de la ambigüedad que siempre ha tenido el PNV es lo que tiene que eliminar, porque si seguimos con la equiparación de víctimas y verdugos no puede haber un acuerdo con fuerzas como el PP que tienen claro quiénes pusieron las bombas y quienes los muertos», ha advertido.