España
Congreso de los Diputados

Podemos recibirá 227.600 € del Congreso con su paso al Grupo Mixto: 168.865 más que con Sumar

La decisión de Podemos de romper con Sumar tiene ventajas económicas para el partido morado

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

La decisión de Podemos de abandonar el grupo parlamentario de Sumar en el Congreso y pasarse al Grupo Mixto, junto con el BNG, Coalición Canaria y UPN, tiene ventajas económicas para el partido de Ione Belarra. La formación contará con una mayor subvención parlamentaria.

El Congreso fija una subvención fija de 30.346,72 euros mensuales por cada Grupo Parlamentario y una variable en función del número de diputados, siendo de 1.746,16 euros mensuales por cada diputado.

Así, con Sumar, Podemos recibía 4.894,63 euros por sus cinco diputados. Es decir, 58.735 euros al año. En el Grupo Mixto, la misma subvención se repartirá entre sólo ocho parlamentarios, correspondiendo a Podemos 227.600 euros al año. Es decir, 168.865 euros más al año.

A eso hay que sumar los ingresos que la formación morada seguirá percibiendo por sus cinco escaños, que se mantiene invariable en 8.730,8 euros al mes, es decir 104.769,6 al año.

Al mismo tiempo, los otros partidos que integran este grupo parlamentario -BNG, CC y UPN- sufrirán un retroceso en sus ingresos, ya que hasta ahora se repartían entre tres los 30.346 euros mensuales, recibiendo unos 10.000 euros por cabeza, y ahora bajarán a menos de 4.000 euros mensuales.

Al margen de las finanzas, Podemos ganará más protagonismo en los debates en el Pleno y en las comisiones, ya que tendrá casi total autonomía mientras que hasta ahora dependía de la aprobación de Sumar. Esto supone que podrán formular preguntas en las sesiones de control al Gobierno de coalición y presentar libremente sus proposiciones.

Ruptura

Tras varios desencuentros en los últimos meses, y la expulsión de Podemos del Ejecutivo de coalición, la dirección morada ha anunciado este martes que abandona el grupo parlamentario de sumar en el Congreso y sus diputados pasarán al Grupo Mixto, donde gozarán de más iniciativa política.

Podemos cuenta con cinco diputados, elegidos en las listas de Sumar. Entre ellos, la secretaria general del partido y ex ministra, Ione Belarra; la responsable de Organización, Lilith Vertsrynge, y el portavoz, Javier Sánchez Serna.

Los desencuentros, que han provocado una enorme tensión en el seno del partido liderado por Yolanda Díaz, se iniciaron con la composición de listas, de las que se excluyó a Irene Montero, y se hicieron aún más evidentes después de perder su presencia en el nuevo Gobierno de coalición, con la salida de Montero y Belarra, entre duros reproches a Sánchez y Díaz. La gota que ha colmado el vaso de Podemos ha sido la imposibilidad de intervenir en el debate sobre Palestina de este martes en el Congreso, en el que Belarra solicitó participar. Sin embargo, la dirección de Sumar apostó por su portavoz de Exteriores, Agustín Santos, el diplomático que fichó Yolanda Díaz como número dos de su lista por Madrid.

Durante su comparecencia ante los medios, Sánchez Serna ha explicado que la decisión de integrarse en el Grupo Mixto responde a que es «imposible» hacer política dentro de Sumar, ante los «vetos» que les impone la formación que lidera Yolanda Díaz.

«No podemos hacer política en el grupo parlamentario de Sumar. La regla no son iguales para todos los miembros de esta coalición», ha reprochado el dirigente morado al denunciar que no se les ha permitido hacer intervenciones en Pleno o presentar iniciativas parlamentarias que impulsaban.

Sánchez Serna ha afirmado que la intención de su partido era «aceptar el golpe» y «pasar página» pero tras el desencuentro con el debate sobre Palestina han optado por la ruptura.

Podemos dispondrá de una mayor autonomía en el Grupo Mixto, donde podrá ostentar un mayor tiempo de intervención. El reglamento del Congreso no establece pautas para el reparto de las portavocías, que habrán de consensuarse entre los partidos que integran el grupo. Desde Podemos han señalado que no están en política por «estar en el Gobierno ni por calentar un sillón», aunque lo cierto es que, económicamente, saldrán ganando.