El PNV choca con Iglesias y obliga al Gobierno a improvisar una salida al estado de alarma

De los 30 días anunciados el sábado por Pedro Sánchez a los 15 que generan consenso. Del PNV y Esquerra a intentar cohabitar los separatistas y Ciudadanos en un mismo voto. De la tranquilidad del Gobierno el fin de semana al nerviosismo del Consejo de Ministros. A menos de 24 horas de la votación de la prórroga del estado de alarma todo está en el aire. Incluso lo aprobado en la reunión ministerial.

Sus socios continuan exigiendo favores, a cambio de su apoyo, que Pablo Iglesias parece no aceptar. La última petición de los nacionalistas vascos es aplazar la aprobación de la renta mínima a después de las elecciones del 12 de julio. Los peneuvistas, tras la convocatoria de comicios este lunes, ya están en la lógica electoral.

El anuncio del ministro de Inclusión y Seguridad Social José Luís Escrivá, de que la renta mínima vital se aprobaría en el Consejo de Ministros del 26 de mayo no gustó al PNV. Aunque ya tenían un preacuerdo con el Gobierno para apoyar la prórroga del estado de alarma, tras aceptar el Ejecutivo su otra condición de que expirase antes del inicio de la campaña electoral, ahora exigen que el nuevo ingreso no coincida con el vasco antes de los comicios. Y eso, Iglesias no está dispuesto a aceptarlo.

Sin los votos del Euskadi Buru Batzar, al Ejecutivo solo le queda recurrir de nuevo a Ciudadanos, intentando que cohabiten en el voto a favor con Esquerra Republicana, y rebajar de 30 días a 15 la quinta prórroga que se debe votar mañana. En Moncloa no descartan ya esta opción, aunque sería un nuevo bandazo y obligaría a rectificar el borrador del decreto que, a su llegada al Consejo de Ministros, hablaba de 30 días hasta el 27 de junio.

ERC, que en la última votación se pasó al ‘no’, no descarta ahora facilitar la extensión. Se lo plantea tras lograr el viernes durante las negociaciones recuperar las competencias en materia de seguridad ciudadana. Hasta ahora era el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, el mando único que comandaba todas las policías.

Ciudadanos, por su parte, que hace dos semanas pactó con el Gobierno su voto a favor a cambio de extraer los ERTE del estado de alarma, avisó a Sánchez que su voto era únicamente por aquella votación. Los de Inés Arrimadas, la semana pasada, dejaron claro que no iban a apoyar una prórroga de un mes. Por eso, ahora, el Ejecutivo se abre a volver a los 15 días que le permita volver a negociar con los naranjas.