España
Cumbre de la OTAN

El paseo Biden-Sánchez no existió para EEUU: ni una sola mención de la embajada o la Casa Blanca

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, coincidió con el presidente estadounidense, Joe Biden, casi seis meses después de su llegada al cargo. Sin embargo, de esa tan ansiada foto buscada por Moncloa no hay ni rastro en las comunicaciones de la Embajada de Estados Unidos en Madrid, ni tampoco en el área de prensa de la Casa Blanca o del Departamento de Estado. La única mención a Sánchez ha llegado a través de un mensaje interno y extraoficial enviado por correo a los periodistas que acompañan a Biden.

Lo que según Moncloa iba a ser una entrevista entre Sánchez y Biden pasó a ser un «encuentro». Después, un «breve encuentro». Y finalmente, un paseo de 29 segundos captado por las cámaras a propósito para, según el departamento de comunicación de Sánchez, mostrar la buena sintonía entre España y Estados Unidos. Un gesto tras varios meses en que Biden ni siquiera llamó al presidente español.

Pasadas 24 horas de ese paseo no hay ninguna información referente a él en la ‘briefing room’ de la Casa Blanca. El área donde la Presidencia estadounidense relata la actividad diaria del presidente Biden. Ahí figuran no sólo los actos previstos en la agenda, sino aquellos encuentros menos importantes. El ejemplo perfecto de este lunes fue el encuentro de Biden con Andrzej Duda, presidente de Polonia, no previsto en esa agenda oficial difundida por la Casa Blanca, pero que sí tuvo su propia nota informativa.

Tampoco hay mención alguna en la página web del Departamento de Estado de EEUU, encargada de coordinar toda la actividad diplomática del país. Sí hay mención, por ejemplo, a las dos llamadas que ha mantenido el secretario Antony J. Blinken con la ministra de Exteriores, Arancha González Laya, en junio y en marzo.

Ni siquiera la embajada

Ese primer contacto de Sánchez con Biden, por quien el presidente español hizo campaña contra Donald Trump, no ha merecido ni siquiera la mención de la Embajada de EEUU en Madrid en sus redes. Sólo hay una felicitación a España por acoger la cumbre de la OTAN en 2022.

Una nota interna extraoficial

La única mención del Gobierno estadounidense a España ha llegado este martes, 24 horas después, a través de una nota interna y extraoficial difundida por los asesores de prensa de la Casa Blanca. Un mensaje enviado por correo a los periodistas que siguen la actualidad de Joe Biden con otros detalles periféricos a la agenda del presidente.

En un pequeño párrafo, la Casa Blanca asegura que «además de las reuniones bilaterales», Biden ha tenido conversaciones individuales con «el presidente Pedro Sánchez de España», así como con otros líderes. Entre ellos, los presidentes de Eslovaquia, Montenegro, Bulgaria, Noruega, Portugal y Luxemburgo. Ese mensaje, sin embargo, no puede considerarse oficial: no figura en ninguna de las áreas de prensa de ninguna institución de la Administración estadounidense.

La nota interna distribuida por la Casa Blanca.

Por otra parte, en ese mensaje Estados Unidos no confirma la duración o circunstancias de esa conversación, ni si está haciendo referencia al paseo de 29 segundos que protagonizaron ambos presidentes. Tampoco confirma que sea ese encuentro de «media hora» que, según la ministra Laya, mantuvieron realmente Biden y Sánchez «con el resto de líderes». Un encuentro que, en vista de la agenda de Biden y la OTAN, es materialmente imposible que se haya realizado en los términos indicados por la titular de Exteriores. Los tiempos no cuadran.

Un encuentro ‘de tercera’

Esa cacareada entrevista entre Sánchez y Biden, lanzada por Moncloa durante el fin de semana, comenzó a levantar sospechas el mismo lunes a primera hora. La agenda pública de Biden no mencionaba a España ni a Sánchez. La revelada por Moncloa unos minutos más tarde tampoco.

Finalmente, acabó confirmándose que la cita de Sánchez con Biden era un encuentro de ‘tercer nivel’. La Casa Blanca califica los encuentros agendados de Biden con líderes de otros países como «bilaterales». Así catalogó, por ejemplo, su reunión con los presidentes de Estonia, Lituania o Letonia del lunes.

En un segundo nivel, la Casa Blanca califica de marginal meetings aquellos encuentros con líderes internacionales en los márgenes de una cumbre. Citas que no figuran en su agenda diaria y de más corta duración. Una de esas reuniones fue la que consiguió Mario Draghi este pasado fin de semana durante la cumbre del G7 (a la que acudió como invitado).

Moncloa pretendía que el primer encuentro de Sánchez con Biden fuera una de estas marginal meetings, como la conseguida por Draghi, pero finalmente se quedó en una simple conversación durante un paseo de medio minuto para el que el presidente socialista tuvo que ir ‘a la caza’ del líder estadounidense.