España
Exhumación de Franco

Los militares del helicóptero evitan cruzarse con el féretro de Franco para no verse obligados a saludarlo

El féretro de Franco ya está cargado dentro del helicóptero ‘Cougar’ del Ala 48 que lo trasladará hasta el cementerio de Mingorrubio. Los pilotos del aparato, oficiales del Ejército del Aire, no han presenciado la maniobra de carga cuando lo normal es que participen activamente en ello. Si se hubiesen cruzado con el féretro, la tradición castrense y la norma les obliga a saludarlo militarmente.

Francisco Franco fue un general condecorado por su desempeño en combate, y como tal, su féretro debería ser saludado militarmente. Eso es, al menos, lo que dice la tradición y las normas castrenses. Incluso si el féretro no fuera de un militar, la norma dicta que debería saludarse con la mano en la frente y el codo flexionado. El típico saludo militar.

En el caso de la exhumación de Franco esas imágenes no se han visto. En primer lugar porque el Gobierno ha prohibido cualquier tipo de homenaje a la figura del dictador. Y en segundo lugar, porque los pilotos no han interactuado con el féretro en ningún momento. Ni siquiera lo han mirado.

La señal en directo ha mostrado la imagen de la carga del ataúd dentro del Cougar del Ala 48 por parte de los trabajadores de la funeraria, mientras los pilotos del aparto se encontraban al otro lado del helicóptero ajenos a la maniobra.

Con la llegada del féretro a El Pardo, los militares repitieron operación. Los pilotos esperaron en la zona exterior del aparato mientras

Según explican fuentes militares a OKDIARIO, las labores de carga «deben ser supervisadas en todo momento por los pilotos, ya que deben comprobar que todo se realiza según lo previsto y que se ajusta a las medidas de seguridad de la aeronave que deberán pilotar con esa carga en su interior». Algo que, como se ha visto, no ha ocurrido.

Ahora, con la llegada del féretro a Mingorrubio, el sacerdote Ramón Tejero, cooficiará una misa junto al prior del Valle Santiago Cantera. Se trata, ha explicado Moncloa, de una petición de la familia inscrita en la “libertad de culto”.