España
Nicolás Maduro

Maduro agradece a Sánchez que acepte a su embajadora en Madrid: «Las cosas avanzan bien»

Los gobiernos de España y Venezuela dan signos de completo entendimiento. El presidente del país chavista, Nicolás Maduro, ha tenido palabras de agradecimiento al Ejecutivo de Pedro Sánchez por aceptar a su embajadora en Madrid: «Las cosas avanzan bien». Lejos quedan los tiempos en los que cargaba con furia contra anteriores presidentes españoles. El presidente caribeño también ha destacado el nombramiento de Ramón Santos Martínez como embajador español en el país latinoamericano, respondido con el nombramiento de la diplomática Coromoto Godoy como nueva embajadora en Madrid que llegará en los próximos días a la capital española. «Creo que, en general, paso a paso, con paciencia estratégica, con diplomacia, con respeto, podemos avanzar con la Unión Europea», ha esgrimido.

En una entrevista en televisión, el dirigente venezolano ha aplaudido que hay «diálogo permanente» con la Unión Europea, en particular con el exministro socialista de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ahora alto representante de la UE para Asuntos Exteriores. El objetivo, dice, es normalizar los lazos diplomáticos después de que muchos países, entre ellos los Veintisiete, han dejado de reconocer a Juan Guiadó como presidente encargado de Venezuela. Sobre sus relaciones con la oposición en el país ha dado las gracias a la celebración en México de una ronda de diálogos con la oposición.

El discípulo de Hugo Chávez ha criticado en Telesur las sanciones y los bloqueos de activos venezolanos en el exterior. Sí ha recuperado sus palabras gruesas contra el Gobierno de Estados Unidos que, considera, trabaja en soluciones «que no tienen sentido» frente a la «diplomacia de paz» que, asegura, pone sobre la mesa su Gobierno.

«En esos años difíciles donde se persiguió a la industria petrolera, Venezuela dejó de recibir 232.000 millones de dólares y hubo un daño económico al Producto Interno Bruto (PIB) por encima de los 630.000 millones de dólares, una catástrofe para Venezuela», ha remarcado el controvertido mandatario. En este sentido, en noviembre, el Gobierno venezolano rechazó la ampliación de las sanciones económicas impuestas por la UE en 2017, que incluyen el embargo de armas y equipos que puedan usarse para la represión en el país caribeño. Estas decisiones de la UE también recoge la prohibición a 36 personas -entre ellas Diosdado Cabello, el número dos del chavismo- de entrar a la UE, así como la congelación de sus bienes.

Guaidó

Por otra parte, Maduro ha lamentado el respaldo otorgado durante meses por Washington al líder opositor Juan Guaidó, máximo responsable de una «asamblea de Narnia», en referencia a los libros de género fantástico. «Nosotros estamos preparados para diálogos al más alto nivel, para relaciones de respeto, y ojalá un halo de luz llegara a los Estados Unidos de Norteamérica, pasaran la página y dejaran esa política extremista a un lado», ha indicado para comentar que estrechó la mano a múltiples líderes internacionales en la cumbre del clima de Egipto en la que sintió «respeto y revolución por la revolución venezolana».

En el plano económico, Maduro ha admitido los duros golpes que ha atravesado Venezuela durante los últimos meses, hasta el punto de que el mandatario llegó a anunciar hace unas semanas una serie de medidas económicas para proteger la tasa oficial del dólar, aplicada en las operaciones de divisas, frente al desplome del bolívar, que perdió una quinta parte de su valor respecto a la moneda de Estados Unidos.

«Ha habido una guerra contra la moneda y ha habido diversos instrumentos en su etapa. Hemos logrado aplacar buena parte de esa perturbación, pero en los últimos tres meses tuvo un gran impacto en el sistema cambiario nuevo que hay en el país, que es un sistema cambiario fundamentalmente de mercado», ha destacado.