España

Junts sentará en la mesa de negociación con Sánchez a dos de los separatistas indultados

Según fuentes de Moncloa Sánchez y Aragonès sólo se sentarán en la mesa unos minutos para hacerse la foto

  • Joan Guirado
  • Corresponsal de Gobierno y Casa Real. Siguiendo la actividad del presidente y líder del PSOE, Pedro Sánchez, y del Rey de España. También política catalana.

Junts per Catalunya quiere sentar en la misma mesa de negociación con Pedro Sánchez y seis de sus ministros a dos de los separatistas condenados por el referéndum ilegal del 1-O. El partido de Carles Puigdemont ha propuesto que su delegación, que acompañará a la de Pere Aragonès, la conformen el vicepresidente catalán Jordi Puigneró, los indultados Jordi Sánchez y Jordi Turull, como presidente y vicepresidente del partido, y la portavoz en el Congreso Míriam Nogueras.

Estos cuatro nombres que JXCat quiere mandar a la mesa deben ser ratificados este martes por el Govern y anunciados por Pere Aragonès, que ya ha recibido la propuesta que, según fuentes cercanas al presidente catalán, no ha gustado. Por parte de ERC acudirán Aragonès y dos de los consejeros, Laura Vilagrà y Roger Torrent, aunque con el movimiento de última hora de sus socios no se descarta la opción de resucitar la presencia de Oriol Junqueras, descartada hace unos días. Cabe recordar que, según han manifestado siempre, se trata de una mesa entre gobiernos y ni Turull ni Sánchez ni Nogueras, así como tampoco Junqueras, forman parte de ningún Ejecutivo.

Pero el precedente de la primera reunión de esta mesa, en febrero de 2020, les avala. Ese día, en el Palacio de La Moncloa, por parte de la Generalitat se personaron Quim Torra y Aragonès -entonces como vicepresidente-, en compañía de diputados como Elsa Artadi, Marta Vilalta, Josep María Jové o incluso cargos en aquel momento técnicos como Josep Rius, ex jefe de gabinete de Puigdemont.

Presencia testimonial

La presencia de Sánchez en la mesa, que se resolvió anoche en una entrevista en el Telediario de TVE, será testimonial. Aunque hasta minutos antes Moncloa aseguraba que el presidente no iba a viajar a Barcelona, de hecho el anuncio pilló por sorpresa a parte de los dirigentes socialistas y al propio equipo de seguridad de Moncloa que tiene que diseñar un dispositivo complejo por las protestas que se prevén en tiempo récord, a última hora decidió que él encabezaría la parte que representa al Gobierno.

Fuentes de ambos gobiernos consultadas por este periódico señalan que ni Sánchez ni Aragonès se van a quedar todo el rato que dure la reunión, como sí hicieron el año pasado el jefe del Ejecutivo y Torra. En esta ocasión, en línea con la primera reunión que mantuvieron ambas administraciones hace unos años en el Palau de Pedralbes, los dos presidentes entrarán a saludar, se harán la foto y dejarán que sean el resto los que discutan los pormenores. Ellos dos protagonizarán una reunión paralela, la segunda en dos meses.