España

La Guardia Civil revela que el CNI catalán hizo listados de empresarios favorables y contrarios al 1-O

El Cesicat, más conocido como CNI catalán, se dedicó al espionaje de ciudadanos y políticos, pero también de un área que preocupaba especialmente a los golpistas: los empresarios. El servicio de espionaje del Govern conocía perfectamente las posibilidades de que hubiese una fuga de sociedades con el inicio del golpe separatista -tal y como se ha confirmado posteriormente- y decidió realizar ficheros de empresarios favorables o contrarios al separatismo, según las sospechas de la Guardia Civil.

Las pruebas encontradas por la Guardia Civil apuntan a que este organismo, que operó como eje del desarrollo y control de la construcción de lo que la Generalitat pretendía que fuese la nueva república catalana, “encargó informes sobre empresarios”. En concreto se trataría de informes que, por discreción, “no los habría realizado el Cesicat” directamente, sino que “los habría encargado”. Esos ficheros, además, se habrían cruzado con datos de políticos y de las relaciones de los directivos con altos cargos: “En total, se habrían realizado una cincuentena de informes sobre miembros del Gobierno (Consejeros)”, incluyendo en ellos, “información sobre relaciones personales o empresariales que éstos podrían tener”.

Con todo ese material, la Benemérita sospecha que se pudieron elaborar listados de empresarios y sociedades que, por su cercanía a los planteamientos de los golpistas, podrían haber sido premiados en su trato público. Por otro lado, y como es evidente, aquellos que hubiesen quedado retratados por su oposición a la nueva república independiente de Cataluña, habrían pasado a una lista con peor suerte, como siempre denunció y sospechó el presidente de Empresarios de Cataluña, Josep Bou.

El dato sobre las actividades del CNI catalán se une a un largo suma y sigue de investigaciones que está acumulando la Guardia Civil y que dibujan un Cesicat convertido en una auténtica policía secreta para tumbar webs incómodas, hacer listados de personas favorables al golpe o contrarias, interceptar teléfonos, entrar en mails privados, etc. Todo, con tal de favorecer el golpe separatista del 1-O, según las “evidencias e indicios” en manos de la Guardia Civil.

Entre los “indicios” detectados por la Guardia Civil, como ya ha adelantado OKDIARIO, se encuentran infinidad de prácticas ilegales que habría desarrollado este organismo. Entre esas prácticas se encuentran la “censura: actividades de censura, solicitando la eliminación de páginas web de contenido no delictivo sin que, a priori, supusieran ninguna amenaza para la seguridad de los usuarios de la red, ni relacionadas con las actividades propias ni las tareas encomendadas normativamente al CESICAT”. También la “interceptación de correos electrónicos”, la introducción de “aplicaciones de control en teléfonos móviles sin conocimiento de los usuarios”, o el “acceso a bases de datos ajenas […] sin contar, presuntamente, con permiso para ello”. Prácticas todas ellas que las fuentes relacionadas con la investigación no dudan en calificar extraoficialmente de “puramente de espionaje”. Y “centrado, aparentemente, en fines políticos y de defensa del separatismo”.