España
Ministerio del Interior

Funcionarios de prisiones denuncian que Interior les obligó a trabajar enfermos y tras 24 horas de servicio

Instituciones Penitenciarias obliga a funcionarios en prácticas a incorporarse a vigilancia

La media de edad de los funcionarios de prisiones es de 50 años y hay más de 3400 vacantes sin cubrir

La tensión entre los trabajadores de los centros penitenciarios y el Ministerio del Interior, al que reclaman la equiparación salarial, se agrava cada día más. Funcionarios de prisiones denuncian que Interior les obligó a trabajar enfermos y tras más de 24 horas de turno ininterrumpido, en contra de su voluntad.

Los hechos tuvieron lugar el pasado fin de semana en varias cárceles como Foncalent (en Alicante), Archidona-Málaga II, Tenerife o Alcobasser donde los servicios se encuentran gravemente colapsados. En el establecimiento penitenciario de Málaga II sólo 8 funcionarios acudieron a trabajar el domingo 16 de diciembre, mientras que en Puerto III se presentaron 9 de un total de 20. El resto de los trabajadores se encontraban de baja por enfermedad temporal, lo que obligó a los empleados públicos del turno de noche del sábado, que comienza a las 21:30 horas, a prolongar obligatoriamente su jornada laboral, por necesidades del servicio, durante todo el día posterior.

Más de 24 horas de servicio consecutivo por falta de personal en los centros penitenciaros y permisos navideños suspendidos

Varios de ellos sufrieron cuadros de ansiedad por la sobrecarga de trabajo, lo que impidió que los presos pudiesen abandonar sus celdas al quedar comprometida la seguridad del centro por falta de efectivos, según confirman a OKDIARIO fuentes próximas a los centros penitenciarios afectados.

Los funcionarios de prisiones denuncian las deficiencias de personal que afectan a más de 21 cárceles españolas y las dificultades de abordar un trabajo de alta exigencia física y psicológica con una plantilla cuya edad media supera los 50 años. Los trabajadores en activo denuncian que existen actualmente más de 3.400 vacantes no cubiertas en Instituciones Penitenciarias que sobrecarga sus tareas y que ha llevado a Interior a suspender vacaciones y permisos navideños a todo el personal.

Funcionarios en prácticas, a vigilancia

Los sindicatos mayoritarios denuncian que en los últimos días, y ante las dificultades de prestación del servicio de seguridad penitenciaria, “se ha procedido por parte de los equipos directivos a una modificación unilateral de los horarios de los funcionarios en prácticas”, de modo que no se respetan las exigencias de cualificación profesional, ni los horarios ordinarios, ni los tiempos de descanso legalmente establecidos.

Además, a funcionarios en prácticas y de carrera destinados a tareas administrativas en el área de oficinas “se les encomienda desempeñar unas funciones del área de vigilancia con las que no están familiarizados”, para las que tienen “muy poca experiencia en su desempeño y con lo que se pone en riesgo la seguridad propia y la del resto de compañeros, así como la de los propios internos y la del mismo centro penitenciario al completo”, denuncian los trabajadores de prisiones. En el caso de la cárcel de Foncalent (en Alicante) algunos ha estado trabajando hasta 14 horas diarias durante más de 6 días consecutivos.

Las situaciones son tan tensas que varios de ellos denuncian “coacciones y amenazas de suspensión de las prácticas” si se niegan a dichas exigencias, llegando incluso a enviar a la policía nacional a un funcionario en prácticas al que no era posible localizar telefónicamente para requerirle que se incorporase al servicio penitenciario de manera inmediata.

Estas actuaciones han motivado que se hayan presentado quejas formales en la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias. De no solventarse las incidencias, los funcionarios advierten que llevarán las decisiones administrativas y a sus responsables directos, “empezando por el propio secretario general, Ángel Luis Ortiz”, ante los tribunales de justicia.

Marlaska se niega a recibirles en Valencia

Así las cosas, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, no ha querido atender a los representantes de los funcionarios de prisiones que le recibieron a última hora de la tarde del lunes, cuando asistía a una conferencia organizada en Valencia por el Club de Encuentro Manuel Broseta bajo el título ‘Europa ante el reto migratorio’.

Varios delegados sindicales se concentraron en las inmediaciones del Hotel SH Valencia Palace, donde se celebraba el acto, para solicitar al titular de Interior que escuchase durante unos minutos sus reivindicaciones, a lo que recibieron una respuesta negativa.

Los presentes denuncian que pese a tratarse de un grupo de menos de 20 personas, desde Interior se cursó la orden a la policía para que procediese a su identificación.