España

El filósofo y periodista Graupera que fingió agresiones el 1-O se presenta como aspirante a alcalde de Barcelona

El periodista Jordi Graupera ha propuesto este martes impulsar una candidatura unitaria de todo el separatismo para disputarle la alcaldía de Barcelona a Ada Colau y eligiendo a un líder por primarias, unas elecciones a las que él se presentaría: «Si el soberanismo se presenta junto, gobernará el Ayuntamiento. Si no vamos juntos, Ada Colau podría revalidar su mandato. De hecho, cualquiera podría gobernar por un voto, incluso Ciudadanos» aseguró.

Graupera ha tenido una activa participación en las calles a favor del separatismo, y el 1-0 protagonizó diversas escenas llamativas. En su presentación como candidato mostró un casquillo que, asegura, recogió el día del referéndum ilegal, el mismo día en que fingió una agresión como se ve en este vídeo:

Ha asegurado que ha trasladado su propuesta al candidato de ERC, Alfred Bosch, al líder del PDeCAT en el Ayuntamiento, Xavier Trias, y al de Demòcrates, Antoni Castellà, y ha asegurado que le han respondido que aunque esta opción no está en sus prioridades están «dispuestos a pensarlo».

Recogida de firmas

Graupera ha abierto una página web para recoger firmas de ciudadanos para después presentárselas a la dirección de los partidos para defender esta propuesta, y ha defendido: «El pueblo organizó un referéndum, y el pueblo puede organizar unas primarias».

Ha optado por unas primarias abiertas en las que pueda votar todo el mundo y se pueda presentar quien quiera, y ha insistido: «El alcalde lo elegimos nosotros, porque quien gane estas primarias, ganará las elecciones» en la ciudad, ya que la lista más votada es la que gobierna si el resto no pacta con mayoría, algo que implicaría un pacto al menos entre ‘comuns’ y Cs, ha dicho.

«El problema más evidente, pero menos importante, es que las relaciones entre las direcciones de los dos grandes bloques no son las mejores que hemos tenido. Pero la parte buena es que las relaciones entre los votantes son más buenas que nunca», ha dicho Graupera.

Asegura que su propuesta no es «un ejercicio aritmético para ganar elecciones» ni un mecanismo de toma de decisiones, sino un cambio de cultura política, que surgió de su tristeza tras la actuación policial del 1-O, que recordaba con un fragmento de una bala de goma que recogió en la escuela Ramon Llull y que llevaba cada día en el bolsillo, hasta que lo guardó y pensó en las primarias.