Una ex alto cargo de Gobernación dice que el la organización del 1-O era competencia de Junqueras

La ex secretaria general de Gobernación Meritxell Masó, investigada por los preparativos del 1-O, se ha desvinculado de la organización del referéndum, alegando que las competencias electorales habían pasado tres meses antes a manos del Departamento de Economía que dirigía Oriol Junqueras.

Según han informado fuentes jurídicas, Masó y la exresponsable del área de procesos electorales del Departamento de Gobernación Montserrat Vidal han comparecido hoy como investigadas ante el titular del juzgado de instrucción número 13 de Barcelona, que investiga los preparativos del referéndum.

El magistrado había citado también a declarar para hoy como investigada a Rosa Vidal, la Interventora General de la Generalitat que certificó que el Govern no había gastado ni un euro en el 1-O, pero su comparecencia se ha aplazado, sin fecha concreta, a petición de su abogado, que ha alegado falta de tiempo para estudiar la causa teniendo en cuenta que su cliente ha sido imputada recientemente.

Junto a la Interventora, el magistrado ha citado a las dos exresponsables de Gobernación como investigadas por un delito de desobediencia, por no haber impedido la celebración del 1-O pese a que ambas figuran entre los cargos del Govern a quienes el Tribunal Constitucional (TC) apercibió de su obligación de evitar el referéndum.

Masó, que ha aceptado responder a todas las partes excepto a la acusación popular ejercida por VOX, se ha desmarcado de los preparativos del 1-O y ha asegurado al juez que ni ella ni ningún cargo de Gobernación participó en la organización del referéndum, dado que las competencias en procesos electorales se habían transferido al de Vicepresidencia y Economía que dirigía Oriol Junqueras, en prisión preventiva procesado por rebelión.

Dicho traspaso de competencias tuvo lugar en julio de 2017 coincidiendo con la última remodelación del gobierno catalán previa al 1-O y en la que abandonaron el ejecutivo varios consellers.

De hecho, Masó fue citada a declarar como testigo en octubre pasado por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, en el marco de la querella que la Fiscalía presentó contra la exconsellera de Gobernación Meritxell Borràs, en mayo del año pasado, por convocar un concurso de licitación para la compra de urnas.

Un mes después, la exconsellera declaró desierto el concurso de licitación de urnas y remitió al TSJC el acta correspondiente para pedir el archivo de la causa contra ella, un documento que, entre otros cargos de Gobernación, firmaba Meritxell Masó.

A diferencia de Masó, la exresponsable del área de procesos electorales del Departamento de Gobernación Montserrat Vidal se ha acogido a su derecho a no declarar, después de que su letrada argumentara que no se le ha dado traslado de la causa y que, por lo tanto, desconoce los hechos que puedan imputarse a su cliente, han explicado las mismas fuentes.

El juez ha tomado también hoy declaración como testigo a otro cargo del Departamento de Gobernación que trabajó en el área de procesos electorales de la consellería.

El testigo se ha desvinculado de la organización del referéndum porque, ha alegado, a partir del 31 de mayo pasó a trabajar en el área de Juventud de la Generalitat, un puesto que llevaba dos años solicitando, por cuestiones personales.

No obstante, ha reconocido que Josué Sallent, exdirectivo del Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CTTI) de la Generalitat e imputado por el 1-O, le hizo alguna consulta relacionada con procesos electorales y, concretamente, con la web del referéndum, según las mismas fuentes.

Tras las declaraciones de hoy, Pedro Fernández, abogado de VOX, ha anunciado que la formación ha presentado una querella ante el titular del juzgado de instrucción número 13 de Barcelona contra el expresidente de la Generalitat Artur Mas y la expresidenta de la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI) Neus Lloveras.

La querella acusa a ambos de los delitos de rebelión, sedición, prevaricación, desobediencia y malversación porque, sostiene Fernández, tuvieron una participación directa en la hoja de ruta unilateral a la independencia y «han causado mucho daño a Cataluña».

VOX considera que Mas debe ser procesado por el 1-O, porque según consta en las agendas incautadas a Josep Maria Jové -excargo de Economía imputado por la organización del referéndum- formaba parte del sanedrín que diseñó la hoja de ruta independentista.

Respecto a Lloveras, VOX solicita su procesamiento al entender que era «la tercera pata» en el papel de las entidades soberanistas para lograr la independencia, junto al expresidente de la ANC Jordi Sànchez y el de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart.