En España se cometen más del doble de delitos de odio por ideología que por homofobia según Interior

En España se cometen más del doble de delitos de odio por ideología que por homofobia, según los últimos datos publicados por el Ministerio del Interior. Tal y como ha podido comprobar OKDIARIO en el registro oficial que realiza el departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska de este tipo de delitos, en 2019 se registraron un total de 596 delitos de odio por ideología y 278 por orientación sexual e identidad de género.

Es decir, de acuerdo con la última actualización de Interior, en España se produce un 114,38% más de delitos de odio por ideología que por homofobia, a pesar de la campaña puesta en marcha en los últimos días por la izquierda tras el asesinato de un joven homosexual en La Coruña.

Aunque la Policía que investiga el suceso no le ha dado la calificación de delito de odio por homofobia, porque trabajan sobre la tesis de que los agresores no conocían a la víctima y, por tanto, tampoco su orientación sexual, la izquierda se ha lanzado a utilizar el terrible caso como una supuesta «punta del iceberg» de un problema de homofobia aguda en España.

A pesar de que nuestro país está considerado desde hace años uno de los destinos más gay-friendly del planeta, el terrible crimen de Samuel Luiz Muñiz, de 24 años, está siendo utilizado por la izquierda radical para desdibujar la realidad y pintar España como un país donde abundan los delitos de odio con móvil homófobo.

Pero lo cierto es que existen más delitos de odio por ideología que por homofobia y, sin embargo, partidos de izquierdas como Podemos y Más Madrid, que condenan enérgicamente presuntos delitos homófobos sin siquiera haberse probado que son tal, se resisten a hacer lo mismo con delitos de odio por ideología.

En este sentido, esta semana han rechazado condenar los gritos profesados al término de una manifestación para exigir justicia por el asesinato de Samuel en la Puerta del Sol contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.

«¡Ayuso, fascista, estás en nuestra lista!», chillaron el pasado lunes cientos de manifestantes a la dirigente ‘popular’. Unas amenazas que no han sido condenadas ni por la portavoz de Más Madrid en la Asamblea, Mónica García, ni por la de Podemos, Carolina Alonso.

«Hay que poner el foco en lo importante», proclamaron ambas, ignorantes quizá de que en España abundan más los delitos de odio por ideología como el que podrían haber cometido los que profesaron las amenazas a Ayuso que los de homofobia.

En concreto, en la Comunidad de Madrid han descendido las agresiones homófobas un 25% desde que gobierna Isabel Díaz Ayuso. Mientras que en 2018 se registraron 345 incidentes de odio por razón de la orientación sexual en la Comunidad de Madrid, en 2019, año en el que comenzó la primera legislatura de Ayuso, éstas descendieron un 7% hasta situarse en 321, según el informe de ‘Incidentes de Odio motivados por LGTBfobia’ que realiza de forma anual el Observatorio Madrileño contra la LGTBIfobia.

Delitos de odio

La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa define el delito de odio como «cualquier infracción penal donde la víctima, el local o el objetivo de la infracción se elija por su (real o percibida) conexión, simpatía, filiación, apoyo o pertenencia a un grupo basado en una característica común de sus miembros, como su raza real o perceptiva, el origen nacional o étnico, el lenguaje, el color, la religión, el sexo, la edad, la discapacidad intelectual o física, la orientación sexual u otro factor similar».

El último informe de Interior sobre este tipo de infracciones cifra en 2019 un total de 1.706 delitos con agravante de odio por antisemitismo, aporofobia, creencias o prácticas religiosas, discapacidad, orientación sexual, racismo o xenofobia, ideología, discriminación por sexo o género, discriminación generacional y discriminación por razón de enfermedad.

Un balance que supuso un 6,8% más de este tipo de delitos que el año anterior. Los que más crecieron en 2019 fueron los delitos de odio por antigitanismo, un 100% más, y por xenofobia, un 20,9% más.