España alcanzaría los 39.326 muertos por coronavirus con el método de recuento de Cataluña

• Carlos Cuesta @carloscuestaem
• Director adjunto en OKDIARIO.
• • 18/04/2020 06:48
  • Actualizado: 18/04/2020 08:45

La nueva metodología catalana de recuento de víctimas mortales por coronavirus ha duplicado las cifras diarias en esta región y ha confirmado la evidencia de que el Gobierno de Sánchez ha diseñado una mecánica estadística que discrimina parte de las muertes para edulcorar la fotografía real de la tragedia humana que atraviesa España.

El pasado viernes, y en el momento de redactar esta noticia, los fallecimientos por el virus acumulados en Cataluña se elevaban a 7.576, mientras que la estadística nacional sólo reconocía 3.752 de esas muertes en ese territorio.

Esa diferencia esconde nada menos que el 50,47% de los fallecimientos. Y si ese mismo volumen de muertes es el que está ocultando el modelo estadístico de Pedro Sánchez a escala nacional, querría decir que la cifra real de víctimas mortales por coronavirus en estos momentos en toda España se sitúa en 39.326 personas fallecidas.

El cambio de recuento catalán ha metido en un problema a Pedro Sánchez. La estadística nacional sólo está considerando como casos de muerte por coronavirus, aquellos en los que se cuenta con una prueba firme o analítica de que, efectivamente, el fallecimiento ha sido provocado por el Covid-19.

En un momento en España en el que los test rápidos no llegan de forma generalizada, ni mucho menos, en el que los PCR se restringen y no alcanzan a la necesidad real de cribado para detectar los focos de contagio, en el que los hospitales están saturados y en el que las autopsias están totalmente limitadas, lo cierto es que un buen número de fallecimientos por coronavirus no están siendo incluidos en el cómputo oficial que el presidente y sus ministros muestran en las ruedas de prensa.

La Generalitat de Cataluña reconoció este pasado miércoles esa ocultación desvelando que, aquel día, los muertos por coronavirus en la región ascendieron hasta los 7.097. Y eso suponía incluir 3.341 fallecidos más de los que se reconocían oficialmente hasta el martes.

Estadísticas oficiales

El Govern cambió para ello su método de recuento de fallecimientos por coronavirus, sumando también, a esas cifras, el número de personas que mueren en residencias, en su casa o sin analítica pese a ser considerados casos Covid-19 por las funerarias, algo que hasta ese momento ni se contaba, ni se reflejaba en las estadísticas oficiales. «El Departamento de Salud informa que en Cataluña hasta ahora ha habido un total de 39.375 casos positivos de coronavirus SARS-CoV-2 en Cataluña. Se trata de casos positivos confirmados por una prueba diagnóstica (test rápido o PCR)», señalaba el texto de la Generalitat que explicaba el cambio del modo de recuento.

«Por otra parte, hay un total de 55.457 casos posibles de infección de coronavirus. Son personas que presentan síntomas y que un profesional facultativo clasifica como posible caso» y «del total de casos acumulados, hasta ahora han muerto en un centro hospitalario con la Covid-19 un total de 3.855 personas».

Pero esa nota incluía, a continuación, el gran cambio: «Información declarada por las funerarias. Tal y como se ordenó desde el Departamento de Salud, las funerarias declaran diariamente los casos de coronavirus difuntos. Un total de 7.097 personas hasta el día de hoy. De estos, 1.810 han muerto en una residencia , 62 en un centro sociosanitario y 456 al domicilio».

La gran pregunta es cómo quedaría el recuento nacional de muertes por coronavirus en caso de aplicar ese mismo modelo a toda España. Por ahora, la única forma de responder a esa pregunta es por medio de una adaptación estadística, puesto que el Gobierno no hace públicos los datos de las funerarias. Es más, ese mismo Gobierno ya ha empezado a condicionar las posibilidades de las funerarias de declarar como casos Covid-19 los que no aparecen en el recuento oficial.

Y esa adaptación estadística da un resultado: 39.326 muertes. Un dato estimativo que no tiene motivos para no ser una buena aproximación a la realidad del drama que vive España. Y, desde luego, una estimación, bastante más cercana a la realidad que el dato que admite el Gobierno tras excluir a todas las víctimas mortales que fallecen sin poder tener ni test, ni analítica hospitalaria, ni autopsia.