España

La Guardia Civil descubre que la jefa de «calidad democrática» del 21-D formó parte del golpe del 1-O

La Guardia Civil ha cazado el teléfono de la actual directora de Calidad Democrática de la Generalitat entre los números que fueron utilizados por los golpistas para eludir el control judicial en la fase final del 1-O. El nombre de este alto cargo es Laura Suñé Salvador y entre sus funciones se encuentra evaluar y promover la participación ciudadana en los cauces democráticos, entre ellos, por supuesto, en las decisivas elecciones de este 21-D.

La Guardia Civil ha constatado que el teléfono de esta garante de la democracia fue usado para mantener conversaciones con uno de los máximos responsables del golpe: Xavier Puig Farré, uno de los detenidos tras el registro al Departamento de Economía del 20 de septiembre y responsable en aquel momento de la Oficina de Asuntos Exteriores. Puig Farré venís, ademas, de uno de los ejes de coordinación del golpe: entró en la Administración catalana en 2012 a través del Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CTTI) de la Generalitat.

En mayo de 2016 Puig Farré pasó al Departamento de Asuntos Exteriores, Relaciones Institucionales y Transparencia, donde se hizo cargo del departamento informático. La Benemérita ha confirmado que esas conversaciones en las que se usó el teléfono adscrito a la actual directora de Calidad Democrática fueron usadas para garantizar las vías de pago ilegales de los mecanismos de voto de los catalanes en el exterior.

El nombre de Laura Suñé Salvador no había sido identificado hasta este momento porque no era ella la que hablaba en las conversaciones. En una de las transcripciones a las que ha accedido ya la Justicia la interlocutora de Puig Farré es una tal Blanca. Usaron esta mecánica de terceros teléfonos tras percatarse los golpistas de que sus teléfonos estaban pinchados. Así, asesorados por los Mossos de Trapero, mantuvieron comunicaciones a través de teléfonos de cargos de segundo nivel para obstruir la investigación que desarrollaba en esos momentos el Juzgado número 13 de Barcelona tras la querella presentada por Vox.

En una de las conversaciones grabadas por la Guardia Civil desde el teléfono de Laura Suñé se puede escuchar como «Blanca» llama a Puig Farré para comunicarle que le envían una partida de «65.000 euros que no van a gastar y se los pasarán a su departamento». El objetivo de este envío de dinero procedente de otro departamento de la Generalitat era seguir pagando los gastos del sistema informático para que los catalanes en el exterior pudiesen votar en el referéndum ilegal. En la conversación grabada, de hecho, dan explicaciones a Puig Farré de cómo falsear un gasto «para justificar el cambio de partida de dinero». La conversación se mantuvo el día 30 de agosto a las 13:49 horas.

Hoy Laura Suñé es la «Directora de Calidad Democrática», tal y como figura en la web oficial de la Generalitat. Entre sus funciones figuran «asesorar a los diferentes departamentos de la Generalidad en materia de calidad democrática», «diseñar, coordinar y evaluar los procesos de participación ciudadana que lleven a cabo los departamentos de la Generalitat y organismos dependientes», «coordinar los espacios estables de participación de la Generalitat», «gestionar la implementación, evaluación y difusión de canales e instrumentos para fomentar y favorecer la participación ciudadana» o «promover la formación, innovación e investigación en materia de calidad democrática». En resumen, todo lo relativo a los procesos democráticos en Cataluña. En la misma Cataluña que afronta ya al decisivo 21-D.

Por si fuera poco, otro teléfono ha sido cazado en el mismo circuito de teléfonos empleados para eludir a la Justicia: el de Núria Vives y Leal, actual subdirectora general de Atención Ciudadana. Es decir, la responsable de toda la red de servicios de información y atención digital -mediante la web, las redes sociales y los servicios móviles-, telefónica y presencial con los ciudadanos catalanes. La misma que comanda igualmente «la planificación y ejecución de campañas de publicidad en los canales digitales de atención ciudadana y establecer los criterios adecuados». Un cauce decisivo para poder colar determinados mensajes entre la población.