España
CONGRESO

El comunista Echenique se niega a llamar «dictadura» a Cuba porque no le gusta «usar palabras gruesas»

Es sorprendente cómo los socios de Pedro Sánchez comparten similitud con el líder socialista en una cosa: son incombustibles a la mentira. Sólo así se entiende que el portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, haya dicho en rueda de prensa que rechaza utilizar palabras «gruesas» como dictadura para describir a la mazmorra castrista en la que el comunismo ha convertido a la isla desde hace 62 años. Lo ha dicho en la Cámara Baja tras ser preguntado sobre si condenaba la «dictadura comunista cubana» y que se impidiera manifestaciones en el país.

A estas alturas, resulta ridículo que un dirigente que está todo el día aludiendo a la dictadura franquista se la coja con papel de fumar a la hora de llamar «dictadura» a Cuba, un régimen que secuestra, tortura y mata físicamente y de hambre a la población desde 1959.  Y dice que lo hace porque «no ayuda a los países latinoamericanos en los que hay conflicto político como es el caso de Cuba utilizar palabras gruesas». Palabras que ellos no pierden oportunidad de utilizar cuando es para atacar a sus adversarios políticos.

Por tanto, ha dicho que tiene que «huir» de términos «gruesos» como tildar de dictadura al régimen cubano, sobre todo cuando España tiene una «responsabilidad especial» con los países iberoamericanos, que son «hermanos» y a los que toda la sociedad española desea que les vaya bien.

En cuanto a las elecciones regionales y municipales en Venezuela, el portavoz de Unidas Podemos en la Cámara Baja ha dicho que es una «buena noticia» para la democracia el concurso de la oposición en estos comicios y ha declinado hacer más comentarios sobre estos comicios a la espera del dictamen de la misión desplegada por la UE. No vaya a ser que le pregunten por las maletas de dinero que supuestamente recibía Juan Carlos Monedero en Caracas.