España

El Rey no comunica su patrimonio a Bildu, ERC, Junts, CUP y BNG por ser ajenos al «pacto constitucional»

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

El Rey Felipe VI ha hecho público este lunes su patrimonio, que asciende a 2.573.392,80 euros, de los que 2.267.942,80 son depósitos en cuenta corriente o de ahorro y valores representativos de la participación en fondos propios de cualquier entidad y 305.450 euros son objetos de arte, antigüedades y joyas de carácter personal. La Casa del Rey ha informado tanto al Gobierno como al principal partido de la oposición, el PP, y a otros grupos parlamentarios. Se ha excluido a ERC, Junts, CUP, Bildu y BNG, partidos que no están con el consenso de la Constitución de 1978. Se ha seguido así el criterio que, en su día, fijó la entonces vicepresidenta Carmen Calvo, que estableció que estas cuestiones fuesen trasladadas únicamente a los partidos constitucionalistas.

Se trata de un ejercicio de transparencia por parte del monarca, que «inició el camino de la modernización de la Corona para hacerla más merecedora del respeto y de la confianza de los ciudadanos bajo los principios de ejemplaridad, transparencia, rectitud e integridad en sus comportamientos», ha comunicado Zarzuela.

Dicho patrimonio, ha explicado la Casa del Rey en un comunicado, procede de las retribuciones percibidas por Don Felipe en los últimos 25 años, primero como Príncipe de Asturias desde 1998 y luego desde 2014 como monarca. En total, en este periodo ha percibido 4.275.766,94 euros, a los que hay que deducir las retenciones fiscales practicadas así como los impuestos satisfechos en estos años.

Este ejercicio de transparencia se produce cuando apenas quedan dos meses para que se celebre el octavo aniversario de su proclamación. Ya entonces, el 19 de junio de 2014, Don Felipe tuvo una especial mención a la demanda de «ejemplaridad» en la vida pública. «Esa demanda de regeneración pública está muy presente en los millones de personas que afrontan su trabajo cotidiano con esfuerzo y honradez, con vitalidad y generosidad» y que «a diario cumplen con sus obligaciones», señaló.