España

Ada Colau y Artadi encabezan una protesta contra el juicio del 1-O en la plaza Sant Jaume de Barcelona

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha sostenido que la única salida a la situación política en Catalunya es que los dirigentes independentistas presos salgan de la prisión y se opte por el diálogo. Por su parte Elsa Artadi ha insistido en que la absolución es la única sentencia posible.

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, se ha referido así a los medios antes de participar en una protesta contra el juicio del 1-O en la plaza Sant Jaume de Barcelona: «La única forma de salir de aquí es desjudicializar, que la gente salga de la cárcel, y que se retome el diálogo y la negociación».

En declaraciones a los medios, ha dicho que este martes es un día triste por ver en el banquillo de los acusados a dirigentes que acumulan «injustamente un año de prisión preventiva», en un proceso judicial lleno de anomalías, con peticiones de penas elevadísimas y acusaciones infundadas, porque en Catalunya ha habido conflictos y diversidad de opiniones pero no violencia, en sus palabras.

Colau ha mostrado su empatía y su apoyo a los presos y a sus familiares, y ha defendido que una mayoría de ciudadanos, tanto en Catalunya como en el resto de España, considera que la judicialización de la situación política catalana es negativa y apuesta por el diálogo.

Asimismo, Elsa Artadi ha insistido en que la absolución es la única sentencia posible en el «juicio del odio» que ha comenzado este martes en el Tribunal Supremo.

Lo ha dicho en declaraciones a los medios durante una concentración en la plaza Sant Jaume, en la que han participado representantes del Govern y del Ayuntamiento de Barcelona, encabezados por Artadi y la alcaldesa, Ada Colau, que han cantado ‘Els Segadors’ junto a un centenar de ciudadanos que se han acercado a la plaza.

Ha sostenido que en el juicio del procés se juzga a 12 personas por permitir hacer un referéndum, que afirma que está despenalizado en el Cógido Penal, por lo que cree que, si no son absueltos, será «una violación de los derechos políticos, civiles y de la legalidad española».

También ha criticado la campaña del Gobierno central ‘This is the Real Spain’, que defiende a España como una democracia real, y ha acusado al Ejecutivo de querer «tapar la vergüenza, tapar el juicio de la ignominia, del odio, contra la disidencia política y contra lo que son opciones políticas legítimas».