Economía
FORO COFARES/OKDIARIO: GESTIÓN PÚBLICO-PRIVADA DE LA SANIDAD

La sanidad privada, pionera en España en permitir que el paciente decida sobre su historial clínico

Uno de los grandes problemas de los pacientes españoles al acudir al hospital es el de la falta de interoperabilidad entre los distintos centros médicos. Los sistemas no están integrados de manera que permitan acceder al historial médico de una persona con independencia de dónde se le haya tratado antes. Este es uno de los asuntos que han tratado el presidente del Grupo Cofares, Carlos González Bosch, el director del Hospital Nisa de Aravaca, Manuel Vilches, y el presidente de HM Hospitales, Juan Abarca, en el primer Foro COFARES/OKDIARIO.

La normativa europea exige desde hace dos años que se ponga en marcha la interoperabilidad a nivel de la UE. En España, sin embargo, esta no se da ni tan siquiera dentro de una misma comunidad autónoma. Hospitales de una misma región utilizan sistemas informáticos incompatibles entre sí, de forma que no pueden compartir información y si un paciente acude por primera vez a un centro hay que hacerle todas las pruebas clínicas de nuevo. Hay cerca de 70 sistemas diferentes en todo el país.  En el sector de la sanidad privada se está trabajando para poner fin a este problema.

Vilches, que también es director general del Instituto para el Desarrollo y la Integración de la Sanidad (ISIS) explica que hay una aplicación móvil en pruebas avanzar en este sentido: “Hemos conseguido la interoperabilidad entre nosotros. Un paciente puede, desde su móvil, tomar la decisión de quién puede y quién no puede acceder a sus historias de los hospitales”. La idea es que esta aplicación esté disponible para cualquiera que acuda a la Sanidad privada, y la Comunidad de Madrid y alguna otra ya han mostrado su interés en sumarse al proyecto, de forma que también esté disponible para el sistema público de estas regiones.

Sin embargo, las cosas no son tan fáciles en toda España. Abarca señala: “Hay diez millones de ciudadanos que tienen historia clínica en la Sanidad privada. Cada vez que proponemos la interoperabilidad para que el paciente pueda ir libremente a un hospital y otro, lo primero que te dicen es ‘¿cuánto va a pagar la sanidad privada para acceder a las historias de la pública?’. A nosotros, los hospitales privados se nos quedan los ojos como platos”.

Vilches dice al respecto: “La lógica lo que manda es que el paciente, que es el dueño de su historia clínica, decida quién tiene acceso a sus datos y quién puede utilizarlos. No tenemos que tomar decisiones por los pacientes, no son tontos”.

Abarca también apunta: “Se está diciendo que la sanidad privada prioriza los intereses económicos a los de los pacientes. Es una majadería. Nunca podríamos hacer eso. Nosotros no miramos los resultados a cuatro años, que es lo que hacen la sanidad pública y los políticos. Tenemos vocación de estar aquí muchos años, y eso sólo se garantiza teniendo contentos a tus usuarios”.

La crítica hacia los políticos y su gestión es común en todos los presentes. En opinión de González Bosch, que preside la Comisión de Sanidad de la CEOE: “La sanidad pública ha huido de mejoras en la gestión, hay cosas que ni siquiera se plantean”. A esto añade: “Con tanta defensa ideológica de la sanidad pública, hace tiempo se abandonó la defensa de verdad, que es hacer bien las cosas”.

Otro de los grandes problemas que enfrenta el sector sanitario, bien sean empresas que gestionan hospitales u ofrecen otros servicios, bien sean farmacias, es el de la morosidad. Bosch denuncia que muchos políticos “siguen escondiendo debajo de la alfombra” las facturas del gasto sanitario. El FLA ha servido para que los Gobiernos regionales hagan frente a sus obligaciones con estos proveedores de bienes y servicios, pero como señala el presidente de Cofares: “Es una deuda que asumen las comunidades autónomas”.

El caso más grave es el de Cataluña, donde las dificultades para cobrar “se han hecho crónicas” según denuncia González Bosch. Ha dicho al respecto: “En Cataluña hay una especie de microclima en el que se producen unos retrasos muy graves de pago en todo lo que tiene que ver con la sanidad. La industria farmacéutica también tiene problemas al respecto”.