Economía
Mantiene la lucha contra la inflación

La Reserva Federal aprieta y sube los tipos 25 puntos hasta el 4,75 % pese a las turbulencias bancarias

La Reserva Federal de Estados Unidos ha obviado las turbulencias que afectan estos días al sector bancario americano y ha decidido continuar subiendo los tipos de interés. En concreto, 25 puntos hasta un nivel de un 4,75%. Este es el nivel más alto desde 2017. La decisión es consistente con la preocupación de la Fed por la marcha de la inflación, que da muestras de resistencias a la baja, y con los reiterados mensajes de su presidente, Jerome Powell, en el sentido de estar dispuesto, si es preciso, a endurecer aún más su política monetaria hasta que empiece a dar resultados sólidos y signos de que está reconduciéndose. La decisión se adopta unos pocos días después de que el Banco Central Europeo subiera los tipos medio punto, hasta el 3,5%, a pesar de los desplomes en la bolsa de las entidades bancarias del Continente tras la crisis de SVB y la caída en picado de Credit Suisse, finalmente comprado por UBS por 3.000 millones.

En el comunicado hecho público por la FED se señala que continuará con el rigor monetario hasta volver a reconducir la inflación a la senda del 2%. La situación en Estados Unidos se ha alterado desde el desplome de Silicon Valley Bank y el contagio a otros bancos pequeños con problemas parecidos: una alta exposición a empresas de alta tecnología muy apalancadas cuyo valor ha ido cayendo en bolsa tras las subidas de los tipos de interés, la tenencia entre su cartera de clientes de depósitos mayoristas que han decidido retirar sus posiciones y la necesidad de estas entidades de vender el enorme volumen de bonos públicos que habían comprobado a coste prácticamente cero de los que han tenido que desprenderse a los tipos actuales de mercado incurriendo en cuantiosas pérdidas. No obstante, la Fed asegura en su comunicado que la situación de la banca americana es sólida y resistente, aunque también advierte de que habrá que estar atentos a la evolución de los acontecimientos.

En su opinión, la causa fundamental de lo sucedido se debe precisamente al endurecimiento de las condiciones financieras y su repercusión sobre las familias y las empresas, pero declara estar conjurado para reprimir la inflación hasta el objetivo previsto a largo plazo. Por eso, todo hace prever que las subidas de tipos continuarán durante los próximos meses a lo largo de las reuniones previstas.

La tormenta bancaria parece de momento haberse calmado gracias a la rápida actuación de la Fed, que en un gesto inusual ha decidido garantizar todos los depósitos sin límite, así como ofrecer toda la liquidez que precisen los bancos con problemas para que no tengan que desprenderse con urgencia de su cartera de deuda pública. Pero esta situación de inestabilidad no parece haber alterado de momento los planes de la Fed de seguir combatiendo con mano dura la inflación y de ajustarse al discurso enarbolado hace sólo unos días por Powell antes de que se produjera la crisis de Silicon Valley.

De hecho, en su comparecencia ante el Congreso de los Estados Unidos a primeros de marzo, el banquero central estadounidense reconoció que la reversión observada recientemente en la tendencia a la moderación de la inflación sugiere que los tipos subirán a un nivel más elevado de lo previsto con anterioridad. «Los últimos datos económicos han sido más fuertes de lo esperado, lo que sugiere que es probable que el nivel final de las tasas de interés sea más alto de lo previsto anteriormente», ha apuntado Powell. De esta manera, el presidente de la Fed ha asegurado que, en el caso de que los datos justificasen un endurecimiento más rápido de la política monetaria, «estaríamos preparados para acelerar el ritmo de las subidas de tipos». Asimismo, ha reconocido que restaurar la estabilidad de precios probablemente requerirá del mantenimiento de una postura restrictiva de la política monetaria «durante algún tiempo».

Powell  expresó entonces su preocupación por que los datos de enero de empleo, gasto del consumidor, producción manufacturera e inflación hayan revertido en parte las tendencias hacia la moderación mostradas hace apenas un mes, y aunque esta reversión refleje parcialmente el clima inusualmente cálido de enero en gran parte del país, el banquero central de EEUU ha advertido de que la amplitud de esta reversión, junto con las revisiones del trimestre anterior, «sugiere que las presiones inflacionarias están siendo más altas de lo esperado en el momento de la anterior reunión del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC)».