Economía
Factura de la luz

La oferta de Naturgy permitirá a un millón de personas del bono social pagar mucho menos en su recibo de luz

Ante la espectacular escalada del precio de la luz, Naturgy ha dado un paso al frente. La compañía ofrece una tarifa liberalizada con la compañía al mismo nivel del precio del ‘pool’ que tenían antes del subidón, es decir, 60 euros/MWh. Una medida que planta cara al Gobierno: los cerca de 1,1 millones de beneficiarios del bono social podrían verse atraídos por esta iniciativa que sí abarata realmente su factura de la luz, que se ha multiplicado por dos durante este año.

Uno de los requisitos impuestos por el Gobierno para poder percibir el bono social es estar dentro del mercado regulado, sujeto a las variaciones del mercado mayorista y que día tras día bate todos los récords históricos. Sin embargo, la única ayuda que el Gobierno de Pedro Sánchez ofrece a estos consumidores vulnerables es la rebaja del 25% que contempla esta bonificación.

Pese a ella, los beneficiarios del bono social están pagando más del doble de lo que pagaban en 2020. Por ejemplo, en el mes de agosto la factura media se situaba en los 93 euros, por lo que los beneficiarios del bono social estarían pagando de media cerca de 70 euros de recibo de luz, con esa rebaja del 25%. Este importe duplica a la factura de la luz que pagaron en agosto de 2020, cuando se situaba en torno a los 26 euros.

El presidente de la compañía, Francisco Reynés, ha señalado que la situación actual requiere del compromiso social y del liderazgo, algo que Naturgy ha plasmado en esta nueva iniciativa. De esta forma, los clientes quedan ‘blindados’ ante las subidas y bajadas del mercado mayorista durante los próximos 24 meses. Naturgy avanza así ante la situación excepcional de precios registrados actualmente en el mercado mayorista en las últimas semanas que ha alcanzado valores récords de más de 140 euros, teniendo en cuenta que el término de energía supone algo más del 30% de la factura final.

La oferta de Naturgy supondría que todos estos consumidores dejarían de ser beneficiarios del bono social -al abandonar el mercado regulado- al menos durante los siguientes 24 meses que dura la tarifa liberalizada. Una permanencia que no genera muchos perjuicios dado que la recuperación de los precios del ‘pool’ previos a esta escalada puede postergarse durante varios años.

La pérdida de beneficiarios del bono social es una constante en los últimos meses, reduciéndose en más de 90.000 usuarios pese al subidón del precio de la luz que el Ejecutivo no ha querido frenar. Sólo en lo que va de 2021, un 10% de las personas que se beneficiaban del bono social eléctrico han dejado de hacerlo. Si nos remontamos al pasado mes de septiembre, el número de consumidores del bono social eléctrico se situaba en 1.168.542, frente a las 1.227.357 personas que disfrutaban de esta prestación en enero de 2020.

Los datos son todavía peores para Sánchez si comparamos las personas que disfrutaban en 2019 del bono social con las que lo hacen en la actualidad: en diciembre de 2019, más de 1.230.000 veían de la reducción en su factura de la luz por el bono social, lo que supone 61.618 personas más que en septiembre de 2020.