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Nueva lista de enfermedades para la jubilación anticipada: confirmado por la Seguridad Social

En 2024, la Seguridad Social ha dado un paso significativo en su política de apoyo a personas con discapacidades, permitiendo la jubilación anticipada para aquellos afectados por determinadas enfermedades. Esta medida ha sido respaldada por el Consejo de Ministros como parte de una serie de reformas sociales y se centra en flexibilizar las condiciones de retiro para quienes presentan ciertas discapacidades. Con la reducción de años de cotización necesarios, se ofrece un acceso más temprano a la pensión, lo cual representa un alivio para muchas personas con condiciones de salud limitantes.

La reforma también incluye una revisión del listado de enfermedades que permiten la jubilación anticipada, simplificando el reconocimiento y reduciendo barreras para quienes buscan acogerse a esta prestación. Esta actualización facilita que un mayor número de personas pueda acceder a una pensión contributiva con un período de cotización de tan sólo cinco años, una reducción notable en comparación con los 15 años anteriormente requeridos. La iniciativa espera beneficiar a más de 6.000 personas en los próximos diez años, duplicando así el número actual de beneficiarios. Por otro lado, la flexibilidad añadida no sólo representa un cambio en el ámbito legal, sino que también simboliza un avance en la equidad para aquellos con discapacidades reconocidas. Con esta medida, se ha introducido una evaluación simplificada de la discapacidad y un sistema más accesible para validar el estado de salud de los solicitantes, adaptándose mejor a las necesidades de este grupo de trabajadores.

Nueva lista de enfermedades para la jubilación anticipada

Uno de los cambios más significativos es la disminución del período de cotización exigido. Las personas con una discapacidad reconocida ya no necesitarán haber cotizado durante 15 años, sino que podrán solicitar la jubilación anticipada con tan solo cinco años de cotización. Esta novedad responde a una realidad que afecta a miles de trabajadores, quienes, debido a sus condiciones de salud, encuentran complicado completar largas carreras laborales.

Además, el Consejo de Ministros ha simplificado los criterios para que se puedan acumular diferentes patologías hasta alcanzar o superar un 45% de discapacidad, un requisito esencial para optar a la jubilación anticipada a partir de los 56 años. En casos de una discapacidad superior al 65%, se podrá reducir aún más la edad de jubilación, aplicando coeficientes específicos al tiempo trabajado. Sin embargo, la normativa establece un límite, impidiendo la jubilación antes de los 52 años, incluso en los casos de mayor grado de discapacidad.

Para que los solicitantes puedan acogerse a lo mencionado, deben acreditar oficialmente su discapacidad. Este reconocimiento puede obtenerse mediante certificaciones emitidas por el Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso) o los organismos competentes de las comunidades autónomas. En algunos casos, también será válido un informe médico que demuestre el padecimiento de alguna de las enfermedades recogidas en la normativa.

La lista actualizada de enfermedades incluye condiciones físicas y mentales reconocidas como discapacitantes, entre las que destacan:

Requisitos para obtener la jubilación anticipada por discapacidad

Para poder optar a la jubilación anticipada por motivos de discapacidad, es necesario cumplir varios criterios específicos:

Ventajas adicionales y criterios de validación

La nueva normativa también elimina ciertos obstáculos burocráticos, facilitando el proceso de validación de la discapacidad. Además de las certificaciones oficiales, se simplifica la inclusión de patologías adicionales que sumen al porcentaje total de discapacidad, siempre que se alcance el mínimo requerido del 45%. Esta disposición reduce significativamente la carga administrativa y permite a los afectados obtener su derecho a jubilación sin procedimientos prolongados.

Por otro lado, aunque los requisitos básicos, como estar dado de alta o en una situación asimilada a la de alta, se mantienen, esta reforma representa un avance crucial para aquellas personas con discapacidad. La actualización del listado de enfermedades y la posibilidad de modificarlo a través de órdenes ministeriales brinda una flexibilidad que permitirá una respuesta más ágil a futuras necesidades.