Economía
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Ni el fin de las restricciones ni las vacunas salvan las rebajas: julio cierra con menos ventas que en 2020

Duro golpe para el sector de la moda en España. El levantamiento de las restricciones y el avance de la campaña de vacunación auguraban una satisfactoria campaña de rebajas de verano que diese oxígeno a un sector fuertemente azotado por la pandemia. Pero lo cierto es que esas pretensiones se han quedado en una ilusión: las ventas han sido inferiores a las de julio de 2020, cuando el país se encontraba en plena crisis del Covid-19.

Eduardo Zamacola, presidente de la Asociación Empresarial del Comercio Textil, Complementos y Piel (Acotex) afirma que los datos preliminares de ventas  de rebajas en el mes de julio muestran un escenario negativo. Si bien en el mes de junio, los establecimientos de moda parecían ver la luz al final del túnel con un repunte del 0,3% de las ventas, el mes de julio vuelve a devolverles a una nefasta realidad. La caída en las ventas en comparación con el mismo mes de 2020, tanto en tienda física como en el canal online, tiene una lectura mucho peor para el sector, ya que en 2020 el nivel de ventas fue uno de los más bajos de la década.

Tradicionalmente, las compras en rebajas -tanto en la temporada de verano como en la de invierno- se caracterizan por ser un consumo de impulso y no por necesidad. Sin embargo, la quinta ola del coronavirus, que ha coincidido con la campaña de rebajas durante el mes de julio, sumado al repunte que está teniendo la pandemia en los jóvenes -uno de los perfiles que más compras realiza durante este periodo- ha hecho que muchos consumidores den marcha atrás a su intención de compra en rebajas pese a los importantes descuentos lanzados por las marcas ante la gran cantidad de stock acumulado.

Un stock, que tras anotarse una caída de ventas del 53% en enero, del 41% en febrero, del 38% en marzo y del 30% en abril, no para de acumularse en los establecimientos, que esperaban darle salida durante la temporada estival de descuentos y que complica todavía más la temporada de invierno, reduciendo el margen del que disponen las tiendas de moda para hacer frente a los pagos que tienen que realizar.

«Estos resultados en las ventas de la campaña de rebajas pueden tener un efecto directo en los comerciantes, que no han parado de encadenar números rojos. Una mala temporada puede hacer que muchos de estos establecimientos se replanteen su continuidad a partir de septiembre» ha señalado Zamacola.