Economía

Nace la Alianza Mundial para la Energía Sostenible

Un grupo de líderes mundiales de toda la cadena de valor de las energías renovables y del ecosistema de innovación del sector ha lanzado hoy una nueva organización para garantizar que las energías renovables sean totalmente sostenibles para las personas y el planeta y para liderar una transición justa que abandone los combustibles fósiles.

Los socios, unidos por una visión compartida de la sostenibilidad del sector de las energías renovables y la necesidad de emprender acciones concretas de colaboración, se han unido para crear la Alianza Mundial para la Energía Sostenible. Esta iniciativa es única por su alcance y ambición, y representa la respuesta conjunta de los miembros fundadores a la urgente necesidad de descarbonizar el sistema energético mundial, garantizando al mismo tiempo su sostenibilidad desde una perspectiva medioambiental, social y de gobernanza (ESG por sus siglas en inglés).

La Alianza Mundial para la Energía Sostenible reúne a empresas de servicios públicos de varias zonas geográficas, a los principales fabricantes de las cadenas de suministro de energía eólica y solar fotovoltaica, así como a asociaciones del sector y socios en el sector de la innovación. Los 17 miembros fundadores, por orden alfabético, son los siguientes: 3M, Adani Green Energy Ltd., Edp, Eletrobras, Enel Green Power, Global Solar Council, Global Wind Energy Council, Goldwind, Iberdrola, JA Solar, Nordex Group, NTPC Limited, Politecnico di Milano, Politecnico di Torino, ReNew Power, Risen Energy y Trina Solar.

«Tenemos que actuar ahora -y actuar juntos- para comprometernos seriamente con una energía sostenible y sin carbono», dijo Salvatore Bernabei, representante de los miembros fundadores de la Alianza Mundial para la Energía Sostenible, y consejero delegado de Enel Green Power. «Perseguiremos nuestra misión de lograr un impacto colectivo en la integración de la sostenibilidad en toda la cadena de valor aprovechando los valores fundamentales y compartidos: responsabilidad, respeto a los derechos humanos, protección del medio ambiente y la biodiversidad, pero también colaboración abierta y transparencia».

La Alianza Mundial para la Energía Sostenible pretende replantear el significado de «energía sostenible» y abarcar a todos los que trabajan en las energías renovables y se ven afectados por ellas, aunando esfuerzos con la sociedad civil, los usuarios finales, los responsables políticos, las instituciones académicas, los proveedores de materiales, los fabricantes de equipos originales y las empresas de servicios públicos afines para interactuar con los gobiernos y los inversores. Esta iniciativa se ajusta plenamente a la agenda 2030 establecida en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU.

Aunque la energía eólica y la solar tienen características distintas como tecnologías renovables, son muy complementarias y comparten tanto trayectorias de crecimiento como retos similares para su desarrollo sostenible. Por tanto, es fundamental que la energía eólica y la solar estén más alineadas para acelerar la transición energética.

«La industria eólica tiene un papel crucial que desempeñar en la limpieza de las partes sucias de la economía mundial, como el acero, el cemento y el transporte pesado, pero también en la descarbonización de nuestra propia cadena de suministro», dijo Ben Backwell, director general del Global Wind Energy Council (GWEC). «El trabajo sobre la propia sostenibilidad de la industria eólica está en marcha a medida que pasamos de los proyectos piloto a un enfoque industrial a gran escala, abordando retos como las soluciones de economía circular para el reciclaje de palas y la protección de las prácticas laborales y los derechos humanos respecto a una mano de obra en rápida expansión.»

Aparte de su impacto climático, la energía solar puede contribuir significativamente a los Objetivos de Desarrollo Sostenible gracias al «efecto dominó» que se extiende a los ámbitos económico, social y medioambiental, beneficiando a áreas como la salud, la educación, la igualdad de género y la mitigación de la pobreza», dijo Gianni Chianetta, director general del Global Solar Council (GSC). «La clave es un esfuerzo conjunto. Ya no basta con que una tecnología, industria u organización lidere el camino: tenemos que liderar juntos, con colaboración y acción conjunta».

El lanzamiento de la Alianza se produce en un momento crítico para la acción climática y la transición energética, justo dos meses antes de la cumbre climática COP26 de las Naciones Unidas que se celebrará en Glasgow. Mientras tanto, la última evaluación científica del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) de la ONU ha advertido de que el mundo va con retraso para limitar el aumento de las temperaturas globales a 1,5 ºC por encima de los niveles preindustriales o incluso mantenerlas muy por debajo de los 2 ºC, como se establece en el Acuerdo de París de 2015, y ha indicado que el planeta se calentará 1,5 ºC en las próximas dos décadas si no se toman medidas drásticas para eliminar las emisiones de gases de efecto invernadero. El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, dijo que este consenso científico «debe hacer sonar una campana de muerte para el carbón y los combustibles fósiles antes de que destruyan nuestro planeta».

El camino para mantener el calentamiento global dentro de los límites establecidos por el Acuerdo de París es el de cero neto para 2050 y es necesario intensificar la acción climática para cumplir ese objetivo. En ese escenario, casi el 70% de la generación de electricidad a nivel mundial provendría de la energía solar fotovoltaica y eólica, según la Agencia Internacional de la Energía (AIE). Las tecnologías de energía renovable, encabezadas por la eólica y la solar fotovoltaica, han pasado a dominar las nuevas instalaciones de generación de electricidad, ya que se han convertido en las fuentes de energía más baratas en muchos mercados. En los últimos siete años, según la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA), se ha añadido anualmente a las redes mundiales más energía renovable que la procedente de los combustibles fósiles y la nuclear juntas: en 2020, el dominio de las tecnologías limpias sobre las fuentes tradicionales aumentó aún más, con 260 gigavatios de generación basada en las renovables en todo el mundo, más de cuatro veces más que otras fuentes.

Los 17 miembros de la Alianza están dispuestos a trabajar juntos para afrontar los retos de la sostenibilidad en esta transición y obtener resultados tanto a corto como a medio plazo. Comienzan su colaboración concentrándose en cuatro áreas clave en las que pueden conseguir resultados rápidos para la sostenibilidad de la industria de las energías renovables, alineando a los diferentes actores mediante el establecimiento y la armonización de normas y métricas, en torno a las cuales se pueden fijar objetivos comunes, y adoptando buenas prácticas. Las áreas de interés son las siguientes: cero emisiones netas y huellas CO2; economía y diseño circular; derechos humanos; y huellas de agua.

La alianza está abierta a nuevos miembros que compartan esta visión y puedan contribuir de forma concreta al objetivo final de convertirse en un sector verdaderamente sostenible dentro de la transición al cero neto para 2050.