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El ‘monopolio’ es el secreto de Amadeus para ser hoy una de las grandes cotizadas españolas

Las aerolíneas preparan un programa que intenta acabar con su posición de dominio

Obtiene de beneficio 1 euro por cada 3 que ingresa, un caso único

Amadeus es la estrella bursátil de la semana en el Ibex 35 español y también el protagonista positivo del selectivo español durante todo el año. Tras salir a bolsa en 2010 y pasar de forma lenta pero sólida desde los 12 euros por acción a los 60 en lo que va de década, este 2018 la acción ha explotado: de 60 a 79 euros en apenas 9 meses, un 31% de subida y se afianza como  quinto valor del Ibex, superando a Telefónica. Moody’s prevé que mejore su ebitda un 8% en el próximo año y medio al calor de la continúa mejora del sector turístico. Sin embargo, ¿justifica su modelo de negocio que Amadeus supere a Telefónica en bolsa? OKDIARIO ha hablado con analistas y miembros del sector turístico, que sin desdeñar los méritos del equipo gestor del CEO Luis Maroto, apuntan a una palabra para justificar su triunfo: «Monopolio».

Amadeus tiene un producto principal y casi único con distintas variantes: su GDS (Global Distribution System), un software que gestiona las transacciones entre las aerolíneas, (o empresas de alquiler de coches, o ahora hoteles) y las agencias de viajes. Las economías de escala que se crean cuando miles de operaciones comparten el mismo GDS son brutales y esto hace que «la cuota que tiene Amadeus en España supera el 90%. Un margen bruto que en el Ibex no tiene nadie», comenta una fuente turística que prefiere el anonimato. En efecto, en el primer semestre de este año Amadeus facturó 2.477 millones de euros y tuvo un ebitda de 1.078 millones, un 48% de la facturación. Estos números hablan de un negocio con una rentabilidad poco común y según las fuentes turísticas se deben al «claro monopolio que le permite tener unos márgenes que van en contra de cualquier ley económica de mercado y empresa».

Amadeus cobraba a las aerolíneas en 2017 unos 4,3 euros por cada reserva, según Bloomberg. Una cantidad atractiva si se tiene en cuenta que este pasado año el beneficio por pasajero de las compañías aéreas fue de 9 dólares (7,74 euros).

Sus competidoras no denuncian la posición monopolística. Todas tienen que perder

OKDIARIO se ha puesto en contacto con Amadeus para preguntar si se consideran un monopolio. La realidad es que ellos, Sabre (fuerte en América Latina) y Travelport (fuerte en Estados Unidos) son las compañías que se reparten, por zonas geográficas, un mercado de servicios IT para aerolíneas y agencias, con muy pocos actores. Aunque superen cotas de mercado razonables en distintos mercados, por el momento no hay enfrentamientos dado que «todas las competidoras tienen mucho que perder, dado que a nivel mundial hay un oligopolio». ¿Será este uno de los motivos por los que no hay denuncias a Competencia?

49% mercado mundial

Desde Amadeus se ha respondido a este periódico con los datos: en 2017, tenían una «posición competitiva» del 43,9%, según sus estadísticas. Sin embargo, este dato es engañoso, ya que las empresas se reparten el mercado mundial por zonas. Así, en España se hablaría de una posición muy superior.

¿Por qué no se ha planteado guerra? Porque a nivel mundial hay un oligopolio, aseguran fuentes turísticas. «Sabre no va a negociar a Amadeus en Bruselas porque Amadeus puede hacer lo mismo», indican.

El analista técnico Eduardo Bolinches también cree que Amadeus «es un monopolio a nivel mundial. Es tipo Grifols, una empresa española que tiene copado un sector. No tiene competencia, como tampoco la tiene Amazon, Google o Apple. Son empresas que mientras que el negocio no se lo quite alguien ahí seguirán».

Por otra parte, los analistas consultados creen que Amadeus tendrá una prueba de fuego cuando comience a cotizar en el Eurostoxx 50, cosa que hará en las próximas semanas. «Esto suele coincidir con caídas de precio», avisan.

Las aerolíneas quieren retomar el control

La entrada de nuevas empresas en el sector que tienen copado es la mayor amenaza para esta compañía. En realidad no son nuevas: Lufthansa, Iberia, Air France y SAS fundaron Amadeus en 1987 y posteriormente la vendieron. Ahora son ellos los que han creado a su principal competidor, que han llamado NDC (New Distribution Capability). Su éxito, sin embargo, no será sencillo una vez que Amadeus ha conseguido el posicionamiento y las economías de escala. «El primero da dos veces y una vez instalado ya no es fácil cambiar. Los cambios siempre molestan», asegura Bolinches.

Sin embargo, hay muchas ganas en el sector de hincarle el diente al margen de la compañía de Luis Maroto, lo cual supone una de las mayores amenazas para que en su futuro tenga tanto crecimiento como lo ha tenido en el apsado.

Nicolás López, de MG Valores, cree que «es una compañía que tiene un monopolio y mientras no tenga una clara competencia se puede esperar que mantenga un crecimiento por encima del normal durante un tiempo indefinido. El tráfico aéreo de pasajeros aparentemente va a seguir creciendo en los últimos años. Si a eso le sumas que suban las tarifas un poco cada año, es una fuente de crecimiento continuo».

La empresa presume de tecnología

Por su parte, desde Amadeus se ha respondido a OKDIARIO enarbolando con orgullo algunos de los datos que demuestran que son un gigante tecnológico. «Amadeus ha pasado de gestionar una media de 6.000 transacciones por segundo hace tres años, a manejar 40.000 transacciones de media en 2017, incluso con picos de 180.000 durante las pasadas navidades. Para ponerlo en perspectiva, Google gestiona una media de 60.000 transacciones por segundo», comentan.

Según indican, «cada día invertimos más de dos millones de euros en innovación. Amadeus es la tercera compañía española que más invierte en investigación y desarrollo». 

Por último, se definen también como «la primera firma en innovación en la industria del viaje y del turismo, según se recoge en el informe anual de I+D que elabora la Unión Europea, que incluye a las 1.000 empresas que destinan mayores inversiones a esta partida. En 2017, Amadeus invirtió más de 763 millones de euros en I+D, aproximadamente el 15% de sus ingresos. En la última década ha consignado más de 4.800 millones de euros a este capítulo».

La compañía con sede junto a la mezquita de la M-30 de Madrid ha llegado lejos, pero ahora le queda lo más difícil: mantenerse como una opción preferente para los inversores, seguir ofreciendo un producto preferente a sus clientes y diversificar hacia áreas donde no tenga tanta presencia. En los hoteles, el segmento donde la empresa intenta implantarse ahora, hay más sistemas y más competencia, el mercado tiene menos margen y menos posibilidad de dominio por una sola compañía.