Economía

Macri abraza el mercado y promete un cambio para atraer inversores extranjeros

La victoria del liberal Mauricio Macri en las presidenciales argentinas supone el final de doce años de kirchnerismo. A partir de diciembre, el nuevo presidente afrontará el reto de recuperar la confianza y atraer inversiones extranjeras al país mediante una liberalización de la economía argentina, estancada a causa de la continua intervención de los anteriores gobiernos.

«Argentina tiene que ser reconocida como un país cumplidor. nosotros vamos a hacerlo mejor de lo que se ha hecho con el club de París y con Repsol», ha defendido Macri en una entrevista para el diario La Nación; en referencia al intervencionismo económico que condujo a la expropiación de YPF a Repsol por parte del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner en el año 2012.

«Hay que reducir la inflación, es una estafa a la gente»

Estas declaraciones del próximo jefe del Ejecutivo suponen una buena noticia para las empresas españolas con presencia en Argentina, como ACS, Telefónica, Mapfre, Abertis, Gas Natural o las entidades financieras Santander y BBVA, pues la idea de Mauricio Macri es llevar a cabo una liberalización económica que facilite las inversiones procedentes del extranjero.

Kirchner expropió en 2012 el 51% de las acciones de Repsol-YPF (Foto: GETTY).

En términos económicos, la principal urgencia para el nuevo Gobierno es tener un plan que reduzca la inflación. «Siempre lo he dicho, es una estafa a los ciudadanos». Macri también apunta que el rol la secretaria de Comercio tendrá que cambiar y «acompañar el crecimiento en lugar de intervenir», porque el objetivo, aseguró, es «bajar el control para que haya un sistema de precios transparente y la competencia sea total y máxima, de forma que los argentinos tengan el mejor producto al precio más asequible posible».

Ese es el camino que Mauricio Macri quiere que Argentina siga: «Cuando se discute si el mercado o el Estado, hay que decir que el siglo XXI es el mercado equilibrado por un Estado fuerte. El problema de Argentina hoy es que su Estado colapsó las infraestructuras, el valor de la moneda o las relaciones internacionales».

La herencia recibida

«Este Gobierno duplicó los impuestos y estableció los más altos de la historia de este país. Argentina no tiene un problema de ingresos». Así, Macri explica que deberá revisar los presupuestos punto por punto para atajar el problema del déficit y ver qué gastos pueden ser eliminados. El vencedor de las presidenciales anticipa que «los planes sociales no van a acabarse», pero añadió que «hay que ser consciente de que lo que esa gente quiere es volver a tener un empleo».

El principal desafío de los primeros cien días de Gobierno, explicó Macri, es «devolver la confianza, que es el elemento vital que mueve la sociedad». El presidente electo denuncia la actitud del Ejecutivo de Cristina Fernández: «El Gobierno apuesta por sostener un relato que chocaba con la realidad y fue redoblando la apuesta por la mentira». Las políticas de la hasta ahora presidenta han dado como resultado un país en recesión desde hace cuatro años incapaz de crear empleo.

La todavía presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner (Foto: GETTY).

Igual que ocurre en España, en Argentina los protagonistas de la política llevan varias legislaturas siendo los mismos. En este punto, Macri se compromete a «elegir a los mejores independientemente de qué partido vengan». El ganador de los comicios presidenciales recuerda que «Argentina lleva 25 años gobernada por los mismos» y, para solucionarlo, declara: «No voy a tener compromiso ni siquiera con la gente. Únicamente lo tendré con los argentinos».